escribir

Escribir: tratar de retener algo meticulosamente, de conseguir que algo sobreviva; arrancar unas migajas precisas al vacío que se excava continuamente, dejar en alguna parte un surco, un rastro, una marca o algunos signos.[Georges Perec]

enero 14, 2010

fidelidades (in)finitas


Parafraseando el nombre de un filme español protagonizado por Carmen Maura, bien podría escribir a manera de título y único contenido de esta entrada, que en asuntos de amores el quid es: (Saber) cómo amar y ser fiel… sin morir en el intento.

Que hombres y mujeres concibamos la fidelidad de manera distinta, no debe ser ninguna novedad. Tampoco, que entre un escritor -novelista o poeta- y un filósofo-escritor, varíe considerablemente la manera de entenderla y asimilarla. En no pocas ocasiones, en medio de la lectura de una novela, del gozoso azote -metafórico, por supuesto- producido por algún poema o un filme de mis querencias (cuando me conecto con una película, yo vivo y sufro en carne propia los desasosiegos, amores y desamores de los protagonistas), ante mis sentidos la infidelidad ha adquirido un aura casi mítica; a veces, hasta heroica o cuando menos, totalmente ajena a la condena. Y lejos de la fantasía literaria o cinematográfica, en la vida real, cuando a uno le ha tocado ver a que hasta los amigos más tranquilos, y enamorados, son infieles, acaba por ver a la infidelidad con un desapego mezcla de objetividad y desilusión; libre de juicios morales y dictámenes condenatorios. Y es entonces, cuando se entiende que para muchas personas la fidelidad haya devenido una empresa casi inalcanzable, que pareciera no encajar en el mundo de hoy. Como si el amar -y ser fiel- encarnara no sólo sensibilidad y voluntad (más lo que a cada quien le haga falta), sino también, una alta dosis de estoicismo. No recuerdo quien fue el famoso que dijo que a estas alturas de la vida, en las que todo -o casi todo- está permitido, el amor y la fidelidad devienen en heroísmo y al mismo tiempo, trangresión (lo dijo así, o en forma parecida, pero me parece que la esencia iba por ahí).

De regreso a las variadas formas de ver y conceptualizar la fidelidad/infidelidad, en más de una oportunidad he escrito aquí que la diversidad de formas de ver y entender al mundo, y aprehender la vida, provocan que aún leyendo lo mismo... no leamos lo mismo. Y de la lectura, esta diversidad de miras puede extrapolarse a la mayoría de aspectos de la vida.

Los escritores, como los grandes cineastas, son una bendición; pero a veces (muchas), juegan con lo sentimientos, laceran viejas heridas y exprimen nuestras emociones, dejándonos sumidos en desasosiegos, "reflexiones" y/o regresiones que duran lo suyo. El escritor brasileiro Rubem Fonseca no se anda con tientos; sus detractores lo acusan de crueldad narrativa (quizá por no ensayar el estilo edificante de su paisano Paulo Coelho), dada su proclividad a relatar las cosas menos gratas del mundo... sin ningún atenuante. Desde que lo descubrí, me gustó su estilo… claro que nadie es perfecto, miren que venir a decir esto sobre las mujeres, los hombres y la fidelidad:
«Ciertas mujeres prefieren la fidelidad a la lealtad, el marido puede ocultarle cuánto dinero tiene esparcido por los bancos del mundo, puede continuar siendo amigo de una persona con quien ella se peleó, puede continuar protegiendo a un pariente parásito que ella odia, puede hablar mal de su madre, hasta puede agresivamente considerarla una retrasada mental (la mayoría de los maridos considera a la esposa una retrasada mental), lo único que no puede hacer es coger fuera de casa, Los hombres por su parte, exigen fidelidad y lealtad, y si su esposa cumple con estos requisitos, puede incluso ser retrasada mental» [Rubem Fonseca, Del fondo del mundo prostituto].
Lo primero que salta a la vista es su fidelidad… estilística: nada de suavidades. Sin embargo, es inevitable preguntarse por qué cree que lo único que las mujeres no perdonamos, es que nuestra pareja tenga sexo fuera del lecho común (peor sería que lo tuviera en el mismo, ¿no?). Más imperdonable aún, me parece, la falta de confianza. ¿Cómo es eso de no decirle a su compañera, dónde y cuánto dinero tiene depositado (y no es que yo sea muy materialista, eh)? Ya de la misoginia nada disimulada, mejor ni hablar.

Variaciones sobre un mismo tema... del estilo directo de Fonseca a la mirada ¿serena o resignada? de un filósofo:
«Ser fiel a las ideas no significa (¡menos mal!) que haya que tener solo una; ni ser fiel en la amistad significa tener sólo un amigo. En estos ámbitos, la fidelidad no significa exclusividad. ¿Por qué va a ser distinto en el amor? ¿En nombre de qué se pretendería el uso exclusivo del otro? Es posible que sea más cómodo o más seguro, más fácil de vivir y, quizá a fin de cuentas, más feliz. Es más, creo que es así mientras el amor permanece. Pero no me parece que el amor y la moral estén esencialmente vinculados a esto. Cada uno debe elegir según sus fuerzas o sus debilidades. Cada uno, o más bien, cada pareja: la verdad es un valor más alto que la exclusividad y el amor me parece menos traicionado por el amor (por el otro amor) que por la mentira. Habrá quien piense lo contrario, quizá yo en otro momento. Creo que lo esencial no es eso. Existen parejas libres que son fieles a su manera (fieles a su amor, fieles a su palabra, fieles a su libertad común…). Y también hay muchas otras, estrictamente fieles, tristemente fieles, en que cada uno de los dos preferiría no serlo…» [André Comte-Sponville]
En esta reflexión, encuentro varios puntos de coincidencia, aún cuando al final me deja mucho en qué pensar. Una percepción que ataña a la amplitud y complejidad de las relaciones, y de la propia fidelidad-infidelidad, siempre me resultará interesante y atractiva. Cuestión de percepciones y sentires, supongo.


------------------

Escultura «La Valse. Les valseurs» Camille Claudel





Amar el mar es como amar a una mujer. Es tan bello y peligroso como cualquiera de ellas. [Jacques Cousteau]

96 comentarios:

Xabo Martínez dijo...

Eres muy buena lectora, Marichuy, y precisamente en este tema acabo de terminar el libro de Hazel R. sobre la relacion amorosa de Sartre y Beauvoir",. y te quedas con muchas cosas, primero que ellos (comodamente, tambien hay que decirlo) dividieron el amor asi: en contingente y necesario. El amor necesario, es el que no se puede dejar (libre eleccion de la necesidad definiria Paz) y el amor contingente (las capillitas como diria mas comunmente Pedro Infante) claro esto para "ambos dos" (como diria tu querido Fox) lo que ya haria mas atractivo el asunto, y con todo y que no se quedo en teoria y que se llevo a la practica.

Xabo Martínez dijo...

II

Y la practica (he aqui el dilema) demostro que no es completamente equivalente porque mientras para Sartre los amores eran conocidos, publicos, para Beavoir eran casi secretos no tanto por ella misma porque en ocasionas la pareja "contingente" era casado. Entonces si dejamos a un lado la equidad y nos centramos en la fidelidad, vemos que si dificilmente se puede ser fiel a uno mismo, pues mucho menos a otra persona, y si lo centramos exclusivamente en la sexualidad, habria que ver que pareciera que en esta caso las mujeres llevan a la delantera, no tanto porque lo sea libremente elegido, sino que su misma condicion lo determina, es decir las mujeres (la mayoria) no cogen, sino que se enamoran, involucran cuerpo, alma (cualesquiera que sea su definicion)...

Xabo Martínez dijo...

III

Y el hombre es un poco como el mito platonico, donde el antropos busca su otra mitad, nada mas que en el caso del hombre cualquier mitad le queda (Oscar de la Borbolla dixit). Y es asi que el hombre carece de memoria amatoria (exceptuando Casanova) pero si busca fidelidad y lealtad (en algunos casos)

Dificil tema Marichuy pero muy bueno para dilucidar.

Dos abrazos.

JP dijo...

-- marichuyita! de lo que se trata es de ser sincero, nuestra condicion animal nos lleva a hacerle mas caso a nuestros genitales pero el amor cuando es real es 100% monogamo; no puedo negar que alguna vez fui infiel, cuando tenia 25 anios (quien no a esa edad?), pero sinceramente andar por la vida siendole infiel al amor, a lo ideales o a las convicciones es simple y llanamente inmadurez (chale, que ruco estoy!). Besitos

Maik Civeira dijo...

Yo nunca he sido infiel a ninguna de mis parejas. Creo que hay que ser honestos desde el principio y saber cuáles son las reglas del juego. Si ambos acuerdan que pueden tener encuentros casuales por ahí, ni pex. Pero si se juran exclusividad y luego andan viendo dónde le ponen, entonces son tristes e hipócritas y se hieren.

Ju dijo...

Amar el mar es como amar a una mujer. Es tan bello y peligroso como cualquiera de ellas. [Jacques Cousteau]

Tan cierto.

Me quedo con esta cita. ¿Me la presta para mí blogcito?? la voy a agregar junto a las caracolas de Neruda...

Ju dijo...

Por cierto, prefiero la palabra lealtad, a la palabra fidelidad.

salute!

Justo dijo...

Un ramillete de opiniones sugerentes...

Por mi parte, a veces pienso que me hallo en otra galaxia, porque no encuentro mucha gente que piense como yo, que doy poca importancia a la fidelidad -y mucha a la lealtad-. Cuando me enamoro de alguien, no le pido exclusividad sexual, ni yo se la prometo. Ya sé que ello conlleva grandes riesgos, pero estoy dispuesto a asumirlos. Y cuanto más mayor me hago.. más me reafirmo en esas convicciones.

¡Un beso!

Unicornio dijo...

Querida Marichuy:

Eso de llegar a los 500 años... ya estoy viejo, caray!

Mira que leer "felicidades (in)finitas" en lugar de "fidelidades (in)finitas... pensé "a ver qué nos cuenta Marichuy acerca de la felicidad...", y mira nomás. ¿Sería que el subconsciente unicorniano actuó por su cuenta?

Por otra parte, qué difícil entendernos en cuanto a la fidelidad y/o lealtad implica(n).

Para los Cuacos con cuerno es (endemoniadamente) sencillo: somos entes individuales y libres. Pero también responsables de ello. Luego entonces, puede que llegue a sentir, pensar o querer alguien/algo más. Pero si te prometo estar "en las buenas y las malas" contigo, ahí estaré, independientemente de credos, razas, amoríos, cuerpos, orgasmos, impotencias (de esas y de las otras, también, je!), edades, arrugas, familiares o políticas. Porque en una promesa así, yo ya no "me pertenezco" solamente a mí. Ya también le pertenezco al receptor(a) de mi promesa.

(Por eso "sólo los dioses pueden prometer, porque son inmortales", diría el buen Jorge Luis).

Y eso no tiene vuelta de hoja (el Bushido, dixit).

Será por eso, insisto, que ya casi nos extinguimos. ¿Quién nos va a aguantar así?

Cuidándome entonces de las promesas que haga, se despide, antes de ser linchado,

el muy noble y muy leal Caballo con Cuerno...

P.D. N'ombre! Ya 500 años? Estoy viejo, eso que ni qué! Ya ni me hagas caso, Marichuy: 'toy chocheando... Mira que no voy con Rubem Fonseca... ¿así que no puedo orgasmear fuera de casa? ¿Y mis fantasías con mi pareja en un hotel? ¿o en la playita, al atardecer? ¿o en el baño del avión, durante una turbulencia (mejor que sobre una lavadora, jeje!)? ¡Ahhh noo! ¡Claro que puedo "amajujar" fuera de casa, po's este! Y mejor ya me voy. Saludos!!

Champy dijo...

Ay COMADRE como te metes en aprientos!!!

Sabes poerfectamente como pienso.

Sabes como me ha ido en la feria.

Creo en el amor porque lo he vivido, y creo en la infidelidad porque la he padecido.

En este mundo cada vez mas hueco y vacio, cada vez está mas cabrón encontrarle sentido a las cosas, a las situaciones, en ocasiones, hasta a los sentimientos. Si de prefrencias se tratara, yo prefiero a un ser humano que se respete a si mismo, solo lo necesario para que le quede respeto para el resto de la humanidad.
Yo antes, me decía fiel, tengo 5 años de no probarmelo, así que ahora solo me considero leal. Igual y si mañana me enamoro y establesco un acuerdo con un humano como el que te platico te voy a decir que mi fidelidad está intacta.
Si encontrar un amor está cabrón, tu crees que voy a encontrar 2?
Y no confundamos sexo con amor.
Coger y Comer son 2 verbos que debemos tener bien satisfechos. Supongo que Amar tambien, pero es prescindible. Al menos yo he prescindido de él 5 años.

Amo a mi gatito, y vieras que fiel y que leal? Nunca nadie me espera por las mañanas y por las noches y me ronronea y me acaricia mis mejillitas y me despierta si ya es muy tarde y me deja dormir si es muy temprano, y me grita de felicidad cada que me ve llegar....

Hoy en día, los animales nos llevan ventaja.

2046 Muy leales besos .

Marina Agra dijo...

Creo que es posible que haya un período de fidelidad provocado por la ausencia de ganas. Pero para mí realmente la fidelidad como premisa no significa mucho, cosa que sí significa la lealtad. Que si la relaciono, pienso que un hombre leal es aquel que no puede llevar una relación paralela a escondidas. Entoncs surge la distinción entre la infidelidad de momento, el rapto, es la conducta permanente con una otra persona determinada: ahí hay deslealtad (siempre que esté escondida).

Apuesto a la verdad, mucho más que a la negación de hechos que -creo- son inevitables como que un hombre o una mujer sienta atracción de estar con otro, más allá de su pareja.

Es un tema muy dabatible. Y, como siempre, me encantan tus citas entre medio de tus reflexiones.

Un beso!

marichuy dijo...

Gab

Creo que más bien soy una pésima lectora: dispersa; no puedo estar con una sola lectura al mismo tiempo.

Sobre la historia de amor de este famoso par, te diré que el tema de las parejas abiertas siempre me ha llamado ala tención. A veces me parece más idílico que cínico; otras, mero cinismo y unas más, realismo puro y duro.

Creo en el amor necesario, en la libre necesidad seleccionada; que decía Paz. Sin embargo, cuando se han visto tantos amores contingentes, por parte de quienes tienen su “amor necesario”, su pareja estable, su Catedral (filósofo Pedrito Infante dixit), es cuando me entra la idea de que quizá el matrimonio de Sartre y Simone, más que cínico... era crudamente realista.

Estoy leyendo "El Libro del Desasosiego" de Fernando Pessoa (se me figura como Los Diarios de Sándor Márai; y su título no podría ser más certero: el hombre respira a ratos pura desazón). Ahí dice cosas como estas:

“Cada uno de nosotros es dos, y cuando dos personas se encuentran, se acercan, se unen, es raro que las cuatro puedan estar de acuerdo. El hombre que sueña en cada hombre, que actúa, si tantas veces se malquista con el hombre que actúa, ¿cómo no se malquistará con el hombre que actúa y el hombre que sueña en el Otro?
[..]
El amor quiere poseer quiere hacer suyo lo que tiene que quedarse fuera para que él sepa que no se vuelve suyo y que no es él. Amar es entregarse Cuanto mayor la entrega, mayor el amor. Pero la entrega total entrega también la conciencia del otro. El amor es, por eso, la muerte, o la renuncia…
[…]
El amor quiere posesión, pero no sabe lo que es posesión. Si yo no soy mío, ¿cómos eré tuyo, o tú mía? Si no poseo mi propio ser, ¿cómo poseeré un ser ajeno?
El amor es un misticismo que requiere ejercitarse, una imposibilidad que sólo es soñada como debiendo ser realizada.”

[Fernando Pessoa El libro del Desasosiego]

marichuy dijo...

PS GAB

Por cierto, sin tantos tecnicismos ni vueltas filosóficas, Oscar de la Borbolla apunta de manera impecable. Aunque no siempre sucede así, mucha de la intolerancia hacia la infidelidad femenina por parte de sus infieles parejas masculinas, parte de esa premisa; las mujeres nos involucramos con el compañero de cama… no sólo cogemos, como si lo hacen la mayoría de los hombre.

Abrazos dobles

marichuy dijo...

Jota-pechocho

¿O sea que juventud e infidelidad van de la mano; al igual que “madurez” (edad) y fidelidad (resignación, aceptación) ¿

Huy, cuánta nostalgia en el “qué viejo estoy”

Besitos

chilangoleon dijo...

yo=por=eso=le=soy=fiel=a=todas=y=leal=a=
ninguna

marichuy dijo...

Ego

Creo que sí, hay que ser honestos, lo cual implica que haya quienes desde un principio confiesen no guardar fidelidad sexual. Creo que dependerás de lo que estés buscando; del tipo de relación que quieras y necesites. No que sea mi estilo, pero supongo que para algunos esto resulta funcional (qué feo se escucha decir una “relación funcional” y sin embargo vieras que he conocido más de una pareja que así se definen).

Saludos

marichuy dijo...

Jules

1.- Se la regalo. ¿Qué mejor que una cita del Comandante de todos los Mares, para completar su post?

La lealtad es primordial en una relación, del tipo que sea; en la vida en general y sobre todo, con uno mismo.

Saludos desde este día luminoso (sol radiante y viento muy fresco, a ratos muy frío, pero con un cielo límpido, como hace rato no se veía)

marichuy dijo...

Justo

Me pasa algo complejo. Yo creo, primordialmente, en la lealtad. No obstante -y pese a más de un descalabro en mi haber-, si creo en la fidelidad, pero tal como dice el filósofo, aparejada al amor: si uno ama, creo que ni se cuestione la fidelidad/infidelidad. Por alguna razón (quizá equivocada) la infidelidad la asocio a la insatisfacción (y no únicamente en el plano sexual). En fin, tema complicado y conflictivo.

Un beso

marichuy dijo...

Mi querido Unicornio

Con esto lo dijo todo:

"... si te prometo estar "en las buenas y las malas" contigo, ahí estaré, independientemente de credos, razas, amoríos, cuerpos, orgasmos, impotencias (de esas y de las otras, también, je!)..."

Pero cuando ya casi le levantaba un monumento... me despierta con la acotación de Borges. jeje

El dilema es ese: no confundir lealtad con fidelidad; se puede ser leal e infiel, aunque no necesariamente engañar. Y en contrapartida, ser desleal y fiel. Y mejor ya no le sigo, porque empiezo a contradecirme (qué raro, jeje)

Un abrazo

marichuy dijo...

"Si encontrar un amor está cabrón, tu crees que voy a encontrar 2?
Y no confundamos sexo con amor."

Mi Champy

No confundimos sexo con amor; al menos no yo. Como dicen por ahí, puede haber sexo sin amor (que lo hay, tú mejor que yo lo sabes), pero lo inconcebible es el amor entre dos... sin sexo.

Yo también creo en el amor. En cuanto a la infidelidad, supongo que sólo se cree en ella cuando se padece (o se comete).

En lo que no creo es que el amor sea prescindidle. Una cosa es que puedas establecer relaciones que no involucren amor y otra que este sea prescindible. Que no haya surgido, aparecido, no significa que sea prescindible. Más bien, es escurridizo, difícil de asir (y luego si tú le huyes, pues peor)

Besos

marichuy dijo...

Marina

Será cuestión de madurez. Como suele decirme Champy: como adultos civilizados que saben a lo que van y hasta donde pueden llegar, soportar y dar.

Repito y coincido contigo: creo, por sobre todas las cosas, en la lealtad. Sin embargo, reconozco esa atávica necesidad, ese instinto primigenio de posesividad, que nos conduce a creer y demandar fidelidad (sexual, física) absoluta. Y digo que hace falta madurez, porque por más que lo conceptualices a priori, a la hora de la verdad, en asuntos de pasiones… la razón es lo último que juega.

Un beso

marichuy dijo...

Chilly

Será al revés ¿no?

Leal con todas, fiel con ninguna (o fiel a varias)

chilangoleon dijo...

no=asi=esta=bien=le=soy=fiel=a=todas=jeje

marichuy dijo...

Chilly

Prefiero la lealtad, por sobre todas las cosas... y para todas las cosas.

chilangoleon dijo...

yo=tambien=pero=cuando=la=he=ejercido=me=
han=dado=punialada=trapera=asi=que=...

chilangoleon dijo...

por=eso=si=quiero=lealtyado=mejor=adopto=
un=perro

chilangoleon dijo...

o=un=lobo=al=cabo=son=igual=de=pulguientos

Champy dijo...

JAJAJAJAJAJA

Con las cracjadas ya se me olvido a que venía!

Al tiro!

A la hora de las patadas las pulgas brincan!

2046

Champy dijo...

Ya me acordé.

Un amigo nuestro me acaba (bueno mas mío que tuyo...bueno si lo conoces pero a ti no te comenta) de decir que nos llevamos muy bien pero que hay un abismo entre mis poetas y los tuyos... y nomás para que se le quite deja subo algo de uno de mis orates.

Mi amigo es muuuuuuyyyyy leal...y no es perro ni lobo.

2046

Canalla dijo...

Fomseca escupe lo que los bárbaros de Baricco comen. El único "pero" con un filósofo francés ocupado de escribir sobre fidelidad es que, para él, nunca será un problema moral, campo donde debe librarse cualquier disquisición sobre ángeles y alfileres.
Con independencia al hecho de que mañana puedo cambiar de parecer, sólo por hoy –un amigo alcohólico dixit- estoy convencido de que, mientras el deseo es bello y popular, a la fidelidad deberíamos esconderla en el armario.
Hace muchos años una hermosa brasileña me dijo “deja ya ese puto libro de Spinoza” y se quitó las bragas. Esa ha sido a la fecha mi mejor clase de filosofía.

Un beso.

PS:

Escucho con asombro tu buen gusto por el Vieille Canaille de Serge Gainsbourg. Buena versión. A mí me mata La Fautive... délicieusement misogyne.

Otro pues.

marichuy dijo...

Chilly

Según yo, los canes son, sobre todas las cosas, fidelísimos.

De cualqueir forma, acabo de dar con la razón de mis desatinos: yo prefiero a los felinos (sobre todo, pumas y gatos).

LUMPENPOETA dijo...

De infidelidades está lleno el mundo y su historia. La fidelidad es un acto voluntario que se convierte en compromiso. El ser humano no es fiel por naturaleza, diríamos, parafraseando al Freud que la fidelidad es represión de los instintos para dar paso a la civilización, a sus instituciones, al matrimonio pues. La fidelidad es un valor que nos inventamos producto de esta cultura de propiedades privadas,clases sociales, Estados y familias, diría el buen Engels.
Creo en la fidelidad para evitar el sida y las ETS, creo en ella (porque es un acto de fe) cuando encuentras la razón de tu vida, diría la cursi de mi prima: a tu media naranja, sucede que creo que la infidelidad no es más que andar regando en otros cuerpos nuestras miserias espirituales, la fidelidad es compromiso y cuestión de madurez como dice el jota pe, ¿será que los patos son "fieles"? desde la óptica humana si, viven en pareja por más de 20 años y no se andan "atrinchilando" diría mi padre otras patas.

La infidelidad, depende del lado donde estés, o se sufre o se goza.

La fidelidad conlleva una gran honestidad (me susurra en paráfrasis el tío del araña).

Eso creo.

Besos que quitan el frío y son curativos... dicen.

marichuy dijo...

Champy

De tus piques con Chilango, me desentiendo.

En cuanto a lo que te comenta tu amigo; supongo que es normal que tú y yo tengamos gustos poéticos divergentes. Tú eres intenso, pero a la vez muuuy pragmático y desapegado. En cambio yo, salvo la intensidad, soy casi lo opuesto y además, por si faltar, de vez en vez… un muchito azotada (apenas para la Pizarnik).

Besitos

LUMPENPOETA dijo...

Me quedé pensando en eso de la lealtad... podrían ser iguales o tener una misma fuente, pero me parece que la fidelidad está más en razón con los sentimientos, como una relación con una persona, mientras que la lealtad se refiere a esas causas que se adoptan en política, religión, etc. de cualquier manera, diccionarios éticos o filosóficos menos, p´al caso. Si de lealtades se trata, soy leal a leer este blog, no importa que la noche me atrape en solitario y ande desanclando balsas para dejar estos exabruptos de palabras, así se resuelve la diferencia, entre fidelidad y lealtad me quedo con mélange.

marichuy dijo...

Canalla

Suele decirse que "(tal o cual escritor o periodista) dice lo que otros callan"; pero tú, como Fonseca, no te andas con tientos: regurgitar lo que otros se tragan. Contundente a más no poder. Un día leía (en Letras Libres) una conversación entre Claudio Magris y Alessandro Baricco y la verdad es que no pude evitar sentirme parte de esos Bárbaros (así sea merced a San Google, jeje) cuya existencia tanto parece lamentar.

Jajá, tu único “pero” al filósofo… me mató (clarito vi a los alfileres y los angelitos, dirimiendo, por sí solos, sus conflictos morales).

Seguro que esa "clase de filosofía brasileña", fue mejor que cualqueir máxima de Spinoza.

Aunque usted no lo crea, en La Fautive más que la misoginia de Serge Gainsbourg, yo veo alguito de despecho (y la letra me encanta, por cierto. la canción que yo quería subir era "Requiem pour un con", pero en este web de musiquita -de los pocos donde hay cosas suyas- no la encontré).

Un beso

«La fautive c'est toi
Le mal que tu m'as fait
Tu vas payer pour ça

La fautive c'est toi
Aujourd'hui tu chiales
Mais ne t'en prends qu'à toi

La fautive c'est toi
Tu m'as possédé
Tu ne m'auras pas deux fois

La fautive c'est toi
Je te promets ma petite
Que tu t'en mordras les doigts»

marichuy dijo...

Lumpenpo

Creo que en dos de los puntos que menciona, radica el fondo de esto:

1. La fidelidad es: antinatural, una elección, una costumbre adquirida.

2. Uno "debe comprometerse" a ser fiel (por elección, por amor, por conveniencia o para prevenir el SIDA,-como dicen los PANistas y la Iglesia Católica, que aunque cojean del mismo píe, no son lo mismo)… pero, si como dicen los científicos británicos y la experiencia, cada día hay menos gente comprometida, ya se verá el resultado.

Y luego, hay que decirlo, está el deseo. Algo tan indescifrable como ingobernable y contra lo cual, temo, no hay compromiso que valga.

Pero, insisto, si uno ama de verdad y tiene una conexión especial con su pareja, ni falta hace nombrar las palabras fidelidad/infidelidad (el quid está en que esa relación se dé, se encuentre).

Un beso para el frío nocturno

marichuy dijo...

PS Lumpenpo

Ups, por andar discutiendo con unos PANyunquistas que juzgan "antinatural" hasta el aire que no respiran, no vi su segundo comentario.

Yo también creo que la lealtad y la fidelidad, aun teniendo similitudes, atañen a cuestiones destinas (que pueden ser incluyentes, pero no necesariamente).

Uno puede ser leal, primero a sí mismo; luego a una causa, a una persona (líder moral) y también, a su pareja, en la medida de que no le "juegue chueco" y no jugarle chueco, implica confesarle (si la hubo) una infidelidad. Así lo veo.

Ya que estoy aporreando el teclado, brevemente le comento sobre una de mis películas de amor favoritas: “In the Mood for Love” (Deseando amar) de WonKar Wai, que justo toca el tema de la fidelidad elegida:

Dos parejas de matrimonios (los Chan y los Chow), por azares del destino llegan a vivir al mismo edificio. Y resulta que la Señora Chan (cuyo marido se pasa de viaje de trabajo) conoce al Sr. Chow (cuya esposa también anda fuera la mayor parte del tiempo) y entre ellos surge un sentimiento tan avasallador como inesperado. Así como decía yo en el post pasado: en el momento menos esperado y por causa de la persona menos imaginada. Y por si esto fuera poco, el marido de ella y la esposa de él… son amantes y aunque ellos -la Señora Chan y el Sr. Chow- lo saben, no se deciden a intentar una relación entre ellos. Fidelidad Elegida, ya no por amor o por que el otro par la merezca, sino por un algo distinto: no desean ser iguales a sus adúlteros cónyuges, ni tampoco vulgarizar su amor. Y sin embargo, pese a ser una fidelidad por las razones digamos “correctas” (me choca la expresión, se me hace tan gringa, pero no encontré otra), en el ambiente flota la sensación de desazón: sabemos que ellos se quedan con los deseos intactos pero contenidos…deseando amar. Y como fondo musical, un melancólico y sensual solo de Yo-Yo Ma, se repite una y otra vez, como acompañando sus desasosiegos. Una joya de película.

Un beso agradecido (y ruborizado) por su lealtad elegida

Georgells dijo...

Hola Marichuy!

Lo malo de llegar tarde a un tema tan interesante es que creo que ya ha sido dicho todo lo importante.

A riesgo de repetir algo de lo vertido en los comentarios, cabría hacer aclarar que existen varios tipos de infidelidad: al menos la ocasional (accidental) y la crónica. No se puede comparar a quien se enamora perdidamente de otra persona con quien anda picando de flor en flor.

Y, por otro lado, también es pertinente comentar que el escritor brasileño yerra al afirmar que lo que no quieren las mujeres es que sus hombres cojan fuera de su cama. De vida real puedo afirmar que hasta eso puede perdonar una mujer, excepto que su pareja se enamore de la otra...

La infidelidad es una realidad compleja, que juzgan quienes no la han padecido y es inexplicable para quien la ha vivido. Pero lo más importante y, a riesgo de ser descabezado públicamente, es que la infidelidad no es culpa exclusiva del infiel, aún cuando la "otra parte" se victimice, se tire contra las paredes, se vierta ceniza en la cabeza y rasgue sus ropajes. En realidad es tan culpable como el infiel. Entre dos personas sólo puede entrar una tercera si existe un espacio entre ambos. Y dicha distancia es responsabilidad de los dos...

Abrazo,

G.

marichuy dijo...

Georgells

Creo que los hombres tampoco perdonan eso: que su mujer coja con otro porque sabe que, las más de las veces, no lo hace sólo como un mero acto carnal.

Creo que no es equivocado decir eso: la infidelidad es cosa de tres (o de cuatro, jeje). Decía yo en alguna de mis respuestas, que uno se deja llevar por el deseo, sí, como algo extintivo, pero también, porque arrastra un vacío, un espacio no llenado por la pareja.

La infidelidad es omplicada e inexplicable, la hayas vivido en carne propia o no; condenatoria, la hayas cometido o no (más de un infiel, suele tener el cinismo de condenarla en público).

Un abarzo

Champy dijo...

Solo aclarando:

Yo Jamás voy a tener por que no lo quiero, un pique con mi Sensei. Se me secaría la lengua o se me caería una mano como a las atracciones de circo por desobedecer o contradecir a sus papás. Solo es analogía, no quiere decir que sea mi papá.

Lo que dije fue en wasa y como consejo, ya ves que a él le gusta mucho patear a los caninos.

2046

Oye ya postea no?

Unicornio dijo...

Mi querida Marichuy:

Releo con interés en tu respuesta las líneas:
"Pero cuando ya casi le levantaba un monumento... me despierta con la acotación de Borges. jeje..."

¡AAHHH, NNOOO!
¡¡Yo quiero mis cabelleras!!, perdón, digo, (y todo por ver películas de Tarantino!)

¡¡Yo Quiero Mi Monumento!!

(Y para ganármelo con todas las de la ley, va la continuación del pensamiento de Jorge Luis, el tal Borges, a la sentencia:

"Sólo los dioses pueden prometer, porque son inmortales"...)

"También los Hombres pueden prometer, Porque en TODA PROMESA HAY ALGO INMORTAL..."

(Y de eso también presume el Bushido, por supuesto, je!).

Esperando tener pronto su monumento (lo más lejos posible del de "Juanito" y el tal "Fox", por vida de Dios!!), se despide,

el escultórico Unicornio...

Unicornio dijo...

... y por cierto, ya libre de la santa (?!) indignación de sentir perdido el monumento al cuerno (Espiralado, eehhh?), concuerdo con Georgells en que muchas veces "obviamos" lo evidente: en una relación de dos, la responsabilidad de una fractura o ruptura es cuestión de ambos, no sólo de uno.

Curiosamente, existen estadísticas donde se corrobora que, para diferenciar más la posición de ambos sexos:
1.- A la mayoría de las mujeres encuestadas NO les importaría que su pareja masculina se acostara con otra... MIENTRAS NO SE ENAMOREN de "la otra".

2.- ...mientras que, entre los varones, su mujer PUEDE incluso estar enamorada o fantaseando con otro, y NO les importa... MIENTRAS QUE NO SE VAYA A LA CAMA con el rival "platónico". Justo la poscición contraria.

Y luego por qué no se entienden, mis queridos chicos y chicas del club de los Homo Sapiens Sapiens.

Y ya me voy. A ver si ya está mi estatua, juar, juar!!

Vanidosamente, se despide,
el exigente (¡y la quiero de Bronce, pues'n!) Caballo con Cuerno (Espiralado y en Ristre)...

Unicornio dijo...

Fe de Erratas (no que ya se iba el hablador Cuaco con Cuerno??):
Donde dice:
"Justo la Poscición contraria"...
Debe decir:
"Justo la posición contraria"...

(Lo cual no es literal. O sea, no es "lo contario", sino "la posición contraria", es decir,... ¡BUENO, YA!!!).

Fastidiosamente, se retira,
el latoso Unicornio...

Cuentos Bajo Pedido ¿Y tu nieve de qué la quieres? dijo...

Corrí desesperádamente a leer tu blog para disipar la turba en mi cabeza. Quedé enardecida con el tema de la infidelidad ja. Supongo que cuando te son infieles, quieres que te sean fieles. Pero cuando eres infiel, empiezas a dudar de lo que pensabas...

Workaholica dijo...

si creo en la fidelidad, pero tal como dice el filósofo, aparejada al amor: si uno ama, creo que ni se cuestione la fidelidad/infidelidad

Si amas profundamente... no necesitas más..

:)

Besitos leales

Mafalda dijo...

...

¡Bah!

De eso me trago vasos y vasos...me refiero a los razonamientos y definiciones.

¿Qué más deseamos exprimirle?
¿Más respuestas que lo que vemos día tras día? Creo que sólo eso.

Pueden explicarlo canallamente y hacer que nos sorprendamos y al mismo tiempo estar de acuerdo con el que lo explica.
Podemos utilizar la moral como limitante (de manera directa o indirecta) y andar caminando amoralmente.

El caso es que cada quien lo acomoda de acuerdo a su actitud y madurez.
Fonseca enseñó su perfil misógino, André Comte-Sponville su moral; tus lectores, Marichuy, se adherirán al de su talla.

Después de estar durante 9 años con un mujeriego, me he convertido en escéptica con lo que respecta a las definiciones de infidelidad y lealtad.

Existe una línea invisible entre el cínico y el escéptico, evitar caer al cinismo es mi trabajo diario.

Saludetes mi Flaquis.

Mafalda

Champy dijo...

ZAS!

Es que me fuí pa'trás!

Oraleeee!!!!!

Que ramillete tan diverso!

....... ay Dios

2046

Ivanius dijo...

No, pues ahora qué decir. Que suene coherente, claro.

Eso es. Coherencia.

Leltad o fidelidad, eso sólo se sabe en la práctica... como elección, no como búsqueda. Y al encontrar las consecuencias de ser (o no) una o la otra cosa, seguir adelante. Más experimentado, o más feliz, o más decidido... pero no más indiferente.

Eleonaí dijo...

Me gustó la expresión: aún leyendo lo mismo... no leamos lo mismo.

Me voy a pensar lo leído.

Dan d'O dijo...

¡Marichuy, Feliz 2010!

Fidelidad o infidelidad...

Creo que no soy de estos tiempos, pues la pregunta nunca me la he puesto. Siempre he pensado que o tienes un amor verdadero o no tienes nada (y si no tienes nada, no sé si se puede hablar de infidelidad cuando se tienen experiencias con varias personas en contemporáneo).

No quiero imaginar un mundo en el que no hay romanticismo, en el que no se lucha por un amor, en el que no se le da importancia absoluta a una pareja. Por mí pueden existir las personas infieles, siempre y cuando existan también las personas fieles y románticas y caballerescas. Sino el mundo se volvería completamente tibio y privo de sentido.

¡Un abrazo!

LUIS TORRES dijo...

Yo creo ke eso de la fidelidad es algo marcado en nuestros genes producto de las religiones ke nos han ido machacando durante cientos de cientos de años ke la infidelidad es pecado. y que "si te veo con otra te me vas directo con la vieja ke te pario"

yo creo en la confianza de uno y otro lado, si mi querida novia por alli quiere un afaire con un chico que le guste, creo ke esta en su total derecho de hacerlo, como yo si se me presenta alguna oportunidad de esas, que a decir verdad ya a mi edad resulta bien jodido.

Grifit dijo...

Me gustó el extracto del autor crudo, creo que más que minimizar a la mujer lo que intentaba era hacer notar el enfoque que la sociedad marca en la mujer en las relaciones, me refiero que la mujer no tomaria tan a pecho una infidelidad si nuestra cultura no le enseñara a hacerlo así, al mismo tiempo creo que el hombre no sería tan infiel si la cultura no le solapara tanto este hecho.

¿Por qué la mujer es una zorra si es infiel y un hombre es todo un semental? ¿Por qué la mujer que perdona una infidelidad es una santa y el hombre un imbecil?

Yo sí estoy en contra de la infidelidad, pero me refiero al engaño, creo que si te comprometes con alguien debes cumplir ese compromiso, si la pareja llega a un acuerdo para dormir con otras personas entonces no veo problema, incluso se me hace sano. conozco a una pareja que tiene problemas con esto, la esposa es muy infiel pero no le gusta que su esposo ande con otras; el esposo es muy fiel y no le gusta que le sean infiel, pero le gusta que su esposa duerma con otros... y creo que hasta quisiera poder verlo. El problema ahi es solo una falta de comunicación.

marichuy dijo...

Champy

Huy creo que ni a tu héroe revolucionario favorito, lo defenderías y respetarías tanto como a Chilly (nótese mi ataque de celos, jeje)

Besito

marichuy dijo...

Mi querido Caballero del Cuerno, especie en extinción, mito genial... Unicornio

Verá usted, yo soy presa fácil de las palabras bien dichas y mejor acomodadas. Entonces leo esa maravillosa línea y casi siento que lo puedo encumbrar en lo más alto de mi altar personal y ya de una vez, edificarle un monumento al estoicismo, la lealtad y el compromiso conyugal. Y de pronto, cuando yo también estoy encaramada en ese idílico sitio de las relaciones soñadas… Zas me deja caer un mazazo de realismo, puro y duro, y con él, mi mundo fantasioso, la vida soñada (ma vie en rose) se viene abajo estrepitosamente y para colmo, el monumento construido a base de sueños y suspiros… me cae en plena cara.

Jajá, ¿así o más melodramática la quiere (a la Marichuyita)?

Pero… bien sabemos que es de sabios rectificar y ya con estas cataplasmas para la desilusión, que me ha venido a dejar esta mañana, puede que le haga yo su escultura. Claro que de una vez debo advertirle, que no espere nada ni remotamente parecido a la Victoria de Samotracia, el Pensador de Rodin o el David de Miguel Angel, eh. Dese de santos con algo al estilo de Sebastián, jeje

Abrazos para el frío

marichuy dijo...

Querida cuentista

Siempre; las coas se ven muy diferentes, dependiendo del lado que te toque estar: el infiel o al que se le es infiel.

marichuy dijo...

Work's

Uno pensaría que es así: que no necesitas más. Pero, más de una vez, la realidad nos ha mostrado algo muy distinto. Lamentablemente.

Besitos

marichuy dijo...

Mafis

Supongo que, parafraseando a Albert Camus, la ingenuidad (y las ganas de creer)... insiste siempre.

Tu última línea, es tan certera.
Al día de hoy, yo sigo tratando, con uñas y dientes, de mantenerme con mi escepticismo en lo alto.

Un beso

marichuy dijo...

Champy

Ya dijimos: aunque leamos lo mismo... no leemos lo mismo.

Tantas formas de ver y sentir; así es.

Besitos diversos

marichuy dijo...

Ivanius

Eso: es necesaria la coherencia. Ya sea para elegirla o para acordar lo contrario (la lealtad y/o fidelidad)

marichuy dijo...

Daniela

Jajá, me sentí retratada: a veces, yo creo que tampoco soy de estos tiempos, como si en mí habitara un espíritu decimonónico.

Creo que uno debe tener, sobre todo, coherencia como decía Ivanius. Ya sea si se compromete a ser fiel, como si acuerda lo contrario.

Yo tampoco quiero imaginar un mundo en el que no haya romanticismo.
Un abrazo y buen año 2010

marichuy dijo...

Elonai

Es que cada uno arrastramos backgrounds tan distintos, que terminamos leyendo (y/o entendiendo) acorde a nuestras necesidades.

Saludos

marichuy dijo...

Luis

La confianza. Uff, qué difícil ganarla y qué sencillo perderla. Justo por no plantear las cosas como son.

Saludos

marichuy dijo...

Grifit

Uno pensaría que a estas alturas de la vida -en pleno Siglo XXI- el seguir midiendo la infidelidad con doble rasero, sería inusual. Nada más falso. Aún siguen despreciando o señalando la femenina y etiquetando a las zorras (o con un epíteto peor) y admirando/envidiando a los machos todo terreno.

Saludos

Mafalda dijo...

...

Como van las cosas, mañana temprano amaneceremos sin árboles y pelando el diente por el pinche frío mi Flaquis.

El recuento de los daños lo veré cuando salga el sol, por lo menos en mi casa el jijo viento arrancó de raiz el árbol que planté de escuincla cuando llegué a vivir ahí, por merito y cae encima de la casa de enfrente, lo detuvieron los cables de luz y teléfono. Por obvias razones no hay luz en casa.

En este momento estoy en el hospital, los vientos huracanados se escuchan gacho, chiflan por las esquinas de los ventanales y, además, se siente un frío cañón.

Bueno, mañana espero encontrar un cielo despejado, digo, que sirva de algo tanto soplido.

Besitos huracanados...

Mafalda

Jo dijo...

A veces pensaba que la infidelidad era un rubro exclusivo y bastante conocido por los hombres, pero siendo precisos y objetivos tambièn hay mujeres si concuerdo que es elecciòn pero tambièn es quiza un modo de ser humano, y no lo justifico pero por natualeza a veces ya ni se sabe que se quiere, o uno se aburre, o pretende llenar huecos o carencias o la sed de aventura que se yo...

si de fantasear se trata por lo pràctico lo hjaria como hombre
para ser infiel lo haria como mujer
por ahi dicen que lo hacen mejor... who knows
de todos modos no es digno de competencia

en fin.. el caso es que habria que ser mas leal a uno mismo pero eso a veces tampoco sale fàcil.

este tema es inagotable
¿la infidelidad serà cuestiòn de cromosomas?

Anónimo dijo...

Infidelidad?? Pffffffff!! Por qué carajos no se follan a sus parej@s?... En fin, estudios muestran que, por naturaleza, los humanos somos polígamos!! Así que, no sé, saquen conclusiones!!

Besos!!

Fernando García Pañeda dijo...

Lo ideal, supongo, es engarzar, si no fundir, ambas cosas: que la una sea parte de la otra. Ser fiel porque se es leal. Y también ser leal aunque sólo sea por corresponder a la fidelidad.
La lealtad: corresponder, compartir.
Un abrazo, Marichuy.

mario skan dijo...

En repetidas ocaciones me encontré con el nombre de este escritor brasilero Fonseca, me propongo leerlo en cuanto vea algo de él , me interesa esa manera de concebir los relatos, narrando lo poco grato.
La infidelidad está tan adentro nuestro, las consecuencias están como grabadas en un chip que dispara un mecanismo pregrabado. Tener una mentalidad abierta, una independencia real y un control sobre nuestras emociones es condición inevitable para transitar los amores dobles.

saludos Marichuy

Marina Agra dijo...

Estoy de acuerdo con vos, Marichuy. Creo que dijiste la palabra justa: también estamos compuestos por sentimientos atávicos. Un beso, este es un debate que da para largo del que, ojalá, algún día podamos argumentar tinto de por medio!

marichuy dijo...

Mafis

Pues estuvo feo, con frío, sin energía eléctrica y sin teléfono ni Internet en algunos casos. En este país, los servicios públicos, son de lo más infiel que pueda haber, jeje.

Pero hoy sí que amaneció despejado... y frío.

Un beso

marichuy dijo...

Jolie

Eso dice tu gurú J. Sabina: que los hombres engañan más pero las mujeres mejor. Ve tú a saber. Cada quien sus vida, sus perspectivas y demás. Creo que a estas alturas, lo único que se pide es honestidad.. que no es poco

marichuy dijo...

Estimado Astrofísico

Por la misma razón que no hacen otras muchas cosas: falta de ganas.

Saluditos japoneses

marichuy dijo...

Fernando

Lo ideal sería complementar ambas; pero primero habría que ser honestos, luego leales y paralelamente fieles. Sin compartir ni compaginar lealtades, me parece, una relación carece de sentido.

Un abrazo

marichuy dijo...

Mario

Rubem Fonseca es un escritor entretenido, contundente y muy agudo (o así lo veo yo). La primera cosa que leí de él, fue "Grandes emociones y pensamientos imperfectos" (una edición mexicana de Cal y Arena) y me fascinó, devoré el libro con ansiedad; luego "Agosto" y "El caso Morel" y algunos de sus cuentos (varios críticos apuntan a que Fonseca es mejor corredor de distancias cortas que de largas, es decir, mejor cuentistas; no sabría decirlo).

Huy Mario, empresa harto complicada, por no decir imposible, el pretender controlar las emociones (y deseos) nuestros.

Saludos

marichuy dijo...

Marina

Y los atavismos emocionales, querida, son cosa difícil de superar. Si lo sabré yo, jeje.

Un beso

karenina Beltrán dijo...

muy buena divagación para reflexionar, hacer un juicio de nuevo o simplemente para disfrutar...abrazos!

virgi dijo...

Cuando se habla de infidelidad, siempre nos referimos a las relaciones entre un hombre y una mujer. Y sobre todo, al aspecto carnal.
¿Y las infidelidades con el pensamiento?
¿Y las de la amistad? ¿Y las traiciones a nuestras convicciones?
¿Y las infidelidades por intereses oscuros?...¡uf, mucha tela que cortar!
Un abrazo, cabecita siempre pensante

virgi dijo...

(sorry, Marichuy, soy la Virgi de siempre, es que no cambié la identidad)

saqysay dijo...

Leí, pero mi comentario, va a ser extenso. Vuelvo pronto!...

Angeek dijo...

Concuerdo totalmente con el comentario de Ego. Y además añadiría que aceptáramos que somos seres ambivalentes. En la pareja, el gran tema es la idelización que hacemos del otro. ¿Cómo puedes exigir momentos placenteros permanentes? En la pareja el conflicto existe y ni es positivo ni negativo...es inevitable y se tiene que hacer algo cuando aparece. O te vas, haces tu duelo y creces o te quedas crecemos juntos.

Saludos Marichuy

marichuy dijo...

Karenina

A veces, sin querer, las divagaciones, se convierten en reflexiones (región 4, je).

Saludos

marichuy dijo...

Querida Virgi

Muy cierto: ser infiel a las ideas (o desleal), a los principios, a a nuestros amigos, puede tener consecuencias aún más tristes y presentar una mayor afrenta.

Un abrazo para vos... la Virgi de siempre.

marichuy dijo...

Saqysay

Aquí espero tu "raro" comentario.

Beso

marichuy dijo...

Angeek

Madura y muy sensata tu respuesta. Creo que esa ambivalencia es la que, en ocasiones, no nos deja ser, ni avanzar. Como decía en la entrada anterior Fernando: el malentendido romanticismo nos daña más de lo que creemos; no pocas ocasiones, entramos a una relación de pareja con expectativas tan desproporcionadas como falaces.

Un saludo

Ju dijo...

Me quedé tarareando con Liliana..."soy una mujer inconveniente, de esas que son fieles relativamente.."

Hay algunas cuestiones, como la de este post, que se me presentan con tantos matices...que se me hace difícil arribar a algo así como una especie de "conclusión". Lo pienso y lo veo de una manera, luego lo repienso y ya le estoy viendo nuevas aristas. Me parece que es bastante más complejo que fiel/infiel...

No lo sé...

Le mando un abrazo grande, mientras suena aquí Sabina hablando de Praga y "cristales de Bohemia"...

Anónimo dijo...

hola Marichuy... lealtad esa es la palabra... la fidelidad no existe,
no hay vuelta atras... cuando ya no estas agusto con alguien es mejor decirselo y san se acabo... para que mentir?

creo que la lealtad y la confianza se llevan de la mano en una relacion de pareja...
uno no ama cuando es infiel...

abrazos desalentados

marichuy dijo...

Jules

Yo creo que está difícil llegar a una sólo e irrevocable conclusión. Y mejor, me parece que en esta materia, como en muchas otras, las decisiones unitarias, como los pensamientos únicos... equivalen a totalitarismos.

Saluditos

marichuy dijo...

"no hay vuelta atrás... cuando ya no estas a gusto con alguien es mejor decírselo y san se acabo... para que mentir?"

Ana

Preferible esto al engaño; al menos en teoría, suena lo ideal.

Un abrazo

El cola E´Flecha dijo...

Yo mejor no digo nada...

saqysay dijo...

Como ya te lo había señalado, en mi breve paso por aquí, hay varias cosas que deseo comentar, pesé a tener algunas cosillas en común. Hace unos días leo una versión de cuentos chilenos. Ella se relatan varias historias/vivencias.

Justo en una, habla de un matrimonio, en dónde el hombre se puede tener sexo con cuanta mujer encuentre a su paso. Simplemente por satisfacer el deseo carnal. No así la mujer. A ella la definen como prostituta, a parte de ser mal visto(definición machista para mi gusto) si ambos poseen los mismo derechos. En fin...

Fidelidad, para mi es comunicación, confianza... Infidelidad, es egoísmo, marchismo... Muchas cosas que realizamos en nuestra sociedad las mujeres son tachan, de ser poco femeninas, y se presta para mala reputación. En cambio cuando es el hombre, eso lo define como un excelente macho y cotizado... Burradas!!...

El escritor Brasileño, es un maestro, aunque sea, algo duro en sus comentarios, tiene mucho de realidad frente a la vida. Claro como dice mi abuela, cuando tenemos tejado de vidrio. Nos duele cualquier palabra, que nos toca de cerca.
Y... comparto eso, que dices tu, que lo único que las mujeres no perdonamos es nuestra pareja tenga sexo fuera de casa, si fuera en nuestra propia cama, de seguro el impacto será fuerte. Sería motivo de no disculpas.

Existen parejas libres que son fieles a su manera (fieles a su amor, fieles a su palabra, fieles a su libertad común…) Yo soy una de ellas, creo en la libertad de expresión, en tener una vida paralela, pero antes que nada sigo siendo una persona, que debo desarrollarme como tal. Eso no significa que debo olvidar que tengo una pareja, el tema pasa por complementar ambas cosas. Así como yo, realizo mi vida, la otra parte tiene los mismo derechos, sin olvidar la comunicación y la confianza.

Saludos, espero no haber sido taan extensa.

marichuy dijo...

Abraxas

A veces, el silencio es más elocuente que cualquier explicación.

marichuy dijo...

Saqysay

Creo que eso que vos mencionas (de casi desdibujar la propia personalidad, por supeditarse a los intereses de la pareja) es algo que ocurre a menudo. Y lo peor, que muchas veces, ahí está el simiente de la infidelidad.

A mí, Rubem Fonseca me gusta muchísimo; su estilo directo y algo seco, me hace leerlo con gusto.

Y esa cita del filósofo, que a nadie parece gustarle, en especial las líneas que entresacas, me parecen muy interesantes.

Al final, creo, lo que importa es cómo se sienta uno en esa relación (sin importar si los acuerdos a los que se ha llegado para su funcionamiento, encajan o no dentro de los cánones sociales establecidos) y eso sí, mejor libre de engaños.

Un beso

Kyuuketsuki dijo...

La fidelidad tiene una base biológica: es el mejor modo en el que el hombre primitivo cazador-recolector podía asegurar su reproducción en un mundo evidentemente desventajoso para él, sin tener que pelearse para obtener hembras (como otros primates). Sin embargo, no ha sido una solución perfecta: nuestra carga genética a disponer de la promiscuidad (como todos los otros simios) nos lleva pues, a la infidelidad... y a tantos problemas mentales que tenemos en ese aspecto. Es bien difícil lograr fidelidad o lealtad, pero es posible. Hasta cierto punto. Al menos eso creo yo.

Anónimo dijo...

nena, tengo que felicitarte, que buuen post te has aventado, de los mejorsisimos que te le leido, y mira que me han gustado muchos.

Tanto interesante como controversial, a mi eso de la fidelidad no es que la defienda pero tampoco creo que sea mas sucia dentro de una relacion amorosa.
cada pareja es tan diferente que una misma persona puede cambiar de opinion con respecto a con quien este... eso he visto y no es que sus valores sean endebles, sino que no es posible que sea diferente.
estoy loquita, verdad?
me siento como en " el divan de marychuy!"...

caramba...

te dejo un gran beso.

marichuy dijo...

Kyuukettsuki

"nuestra carga genética a disponer de la promiscuidad (como todos los otros simios) nos lleva pues, a la infidelidad... y a tantos problemas mentales"

Uf y los problemas eso es lo peor (los problemas de consciencia). Y al final, nunca tenemos una solución que deje conformes a todos. Las relaciones humanas, todas, son complicadas; las de pareja, infinitamente más.

marichuy dijo...

"cada pareja es tan diferente que una misma persona puede cambiar de opinión con respecto a con quien este"

Sonis

Tienes razón; toda. Uno puede cambiar de parecer; las circunstancias, los sentimientos, la propia dinámica de la relación. Tan complicado y si, controversial. En lo personal, creo que lo principal es la honestidad.

Un beso y gracias