escribir

Escribir: tratar de retener algo meticulosamente, de conseguir que algo sobreviva; arrancar unas migajas precisas al vacío que se excava continuamente, dejar en alguna parte un surco, un rastro, una marca o algunos signos.[Georges Perec]

noviembre 27, 2007

Divagaciones de una enferma; entre el odio y los amores que matan

Estoy con una dura gripa y he tenido que quedarme guardadita; vaya ironía, librarme de ir a la oficina -y de lidiar con el jefe de mi jefe-... para quedarme encerrada en casa. Eso de estar bajo encierro forzoso tiene sus inconvenientes, el principal es que a uno le da por pensar loquera y media; y como además, la gripa acarrea decaimiento y hasta depresión, la cosa puede ponerse peor. Para prevenir, o cuando menos aligerar dicha sintomatología, había decidido escribir algo un tanto disparatado (no presumo ser 100% sensata, pero bueno). En esas estaba cuando tuve la peregrina idea de abrir la edición on line del periódico y oh¡, lo primerito que me encuentro son unas imágenes de la violencia desatada en estos días a las afueras de París; al leerlo, no pude evitar recordar una las películas más impactantes de los años 90’s Haine, La (1995) (El odio) por un instante pensé en escribir algo al respecto, relacionando la premisa de esa película [dirigida por Mathieu Kassovitz en 1995, protagonizada por un increíble Vincent Cassel -bueno lo increíble es que después de semejante actuación, ahora ande haciendo papelitos tercerones en la zaga de Danny Ocean’s...; tanto, como increíble resulta que después de escribir y dirigir ese filme que le valió a los 27 años el premio al mejor director en el Festival de Cannes, el novio de Amélie Poulain (2001) haya realizado uno de los esperpentos más infames del cine hollywoodense, Gothika (2003)] con los sucesos el otoño de 2005 y con los de este mes. La tentación era mucha, pero no sucumbí. Pensé que si últimamente mis escritos han rondado del lado opuesto al odio, el venir a hablar de violencia racial, desigualdad social, represión policial y de pasada, despotricar contra Sarkozy, francamente podría acarrearme la depresión de la que ando huyendo.

Mejor tocar cosas más agradables o por lo menos, no tan duras; mejor referirme al “morir de amor” y no hablo de la “petite morte”, de ese instante supremo, generalmente breve, del encuentro sexual, amoroso, o como cada quien le llame, durante en el cual se experimenta un abandono total. No, hablo literalmente de “morir amando”. Existen incontables tesis al respecto, canciones y por supuesto, películas... que abordan desde opuestos puntos de vista, esa creencia de que no pude haber muerte más gozosa que la acontecida justo después del clímax sexual. Yo pensé en Matador, la película de Pedro Almodóvar. Humildemente considero que antes de volverse un realizador reconocido y aclamado, de que Hollywood “lo descubriera”, Pedrito, aún en pleno proceso de maduración y de conformación de su estilo característico, era más subversivo y aunque sus filmes adolecían algunas fallas, también, mostraban mayor frescura, originalidad y vitalidad. A esa época corresponden Matador (1986) y La ley del deseo (1987); ésta última, por su abierta temática homosexual debió generar escándalo y demás reacciones de la hipócrita y doble moralina sociedad. Extrañamente, a mi me parece mucho más perturbadora
Matador (1986)


La sinopsis (de todos conocida)
: Matador es una historia en la que confluyen variopintos personajes, los esenciales son Diego Montes (Nacho Martínez), ex-torero forzado al retiro por causa de una cogida, dedicado ahora a la enseñanza de la tauromaquia y para quien, el haber dejado de matar (toros) es casi como haber “dejado de vivir”. Para combatir esa sensación de muerto en vida, se ha transformado en un asesino que va por ahí conquistando (es un tipo atractivo) chicas ingenuas a quienes mata justo en el momento del orgasmo -o sea, que les lleva a prolongar eternamente su “petite morte”. Por otro lado, está María Cardenal (Assumpta Serna) una abogada criminalista muy dominante, dedicada a investigar los asesinatos de las conquistas de Dieguito y quien también, está obsesionada con el ex–torero, pues como él, la dama acostumbra matar a sus conquistas de ocasión... durante el clímax sexual (les entierra en la nuca una especie de broche para el cabello en forma de... estoque). Por ahí andan un muchacho bastante desequilibrado y de dudosa masculinidad –hijo de una madre castrante, que más-, interpretado por un joven Antonio Banderas; una fanática religiosa (católica, del Opus Dei, creo); Carmen Maura en un personaje muy curioso y algunos otros s que ya no recuerdo bien.

Lo que me parece interesante de esta película es como, con total desparpajo no exento de ciertos momentos francamente barrocos y de otros plenos de simbolismo, Almodóvar plantea asuntos por demás incitantes. Al situar a su asesino dentro de la fiesta brava está involucrando cuestiones religiosas; obvio, eróticas, míticas. Está refutando por lo menos dos mandamientos católicos: no matarás y no fornicarás; exhibiendo los fanatismos religiosos; al mismo tiempo, expone a la fiesta brava, vista ya sea como un arte apasionante, o como un acto de mera barbarie; pero que indudablemente conlleva una profunda carga erótica, seductora. No se necesita ser un discípulo freudiano, ni un aficionado a la tauromaquia, para percibir en el enfrentamiento del matador con el toro, la búsqueda del dominio sexual; tampoco para ver como los espectadores parecen excitarse tanto, gozar literalmente, mientras ven como el torero se juega el pellejo y casi aullando de placer en el momento -breve, como la petite morte- que el torero ensarta en el animal vencido la estocada letal y, a veces, perfecta.


Y sin embargo, en medio de este desaforado asunto que mezcla a mujeres dominantes con hombres sumisos, pasiones extremas y asesinatos;
por momentos francamente disparatado, con cierto toque de humor negro y con algo más que guiños a la homosexualidad; puede hallarse una historia de amor, un claro ejemplo de amour fou, pero al fin de cuentas una historia de amor. María y Diego eran, lo que en lenguaje cursi se diría, “el uno para el otro”. La escena final, cuando ambos por fin logran estar juntos y amarse hasta el limite de la pasión, es como una metáfora de todo, ahí se empalman no solo el clímax sexual, la búsqueda por eternizar el uno la petite morte del otro; sino también, el momento cumbre de la fiesta brava, ambos planos enmarcados en el momento culminante del día, durante el ocaso el sol. La imagen del cielo teñido de rojo es más que simbólica; es la expresión misma de pasión, pero también de la muerte violenta y ¿por que no?, ya que ando medio cursi, una manera de renacer... a través de la muerte.




40 comentarios:

Waiting for Godot dijo...

Pedro, es uno de mis favoritos, y me gustan mucho sus películas al inicio, aunque también muchas después de que ya era famoso. Besotes. Espero que te mejores prontito.

marichuy dijo...

Wainting

Hola, recuerdo que en alguna ocasión algo me habías comentado de tu gusto por el cine de Almodóvar.

Un abrazo y gracias

Gerardo de Jesús Monroy dijo...

La vi hace muchos años. Tengo que volver a verla, porque ya no la recuerdo bien.

Asesinar en el instante preciso del orgasmo alimenta el narcisismo del asesino, pero, sabiendo ahora de la regularidad con que mujeres y hombres fingimos el orgasmo o el placer, puedo imaginar una escena de ironía donde al asesino se le plantee esto: ¿qué tal si está dejando su obra inacabada? Estaría satisfaciendo su ego con una fantasía, mientras no compruebe lo contrario; sería un acto masturbatorio, donde el placer deriva de creer que está llevando al otro (la otra) al orgasmo, sin saber si lo está logrando en realidad.

MagnoliaNegra dijo...

Con gripa o sin gripa te va bien escribir.
Esos tiempos de Almodovar, clásicos actuales, son la escencia de su cine. Ahora ver sus films es como una maqueta, se metió en una fábrica de salchichas y se nota demasiado.

De todas formas las pequeñas muertes como las descirbies en el post, pefieros verlas como momentos de felicidad, fracciones de segundos alados, y morir así, tal vez, es mejor que infartada.

Cariños Marichuy.

Champy dijo...

Esperando te mejores pronto COMADRITA.

Efectivamente la situación actual en los suburbios parisinos a mi tambien me trajeron ala mente ese excelente titulo que tuviste el favor de regalarme y toda la vida te lo voy a agradecer.

Me pareces muy severa con Tu novio y el de Amelie, efectivamente la estan ensuciando feo, pero son muy jovenes ambos, y pueden rectificar, y el daño no ha sido tal como para descartarlos en el futuro.

Y haces bien comadre, distraete en el cine, que es lo tuyo.

De Matador hay mucho que decir, mucho que subrayar mucho que eliminar.

Pero como bien subrayas y secunda MAGNOLIA, el tremendo ojo que poseia el manchego para describir azotes, de estilo lo transformó a fórmula, a maquila, y se desgastó.

La tauromaquia la retoma en la que para mi gusto su gran obra: Hable con ella, y el efecto es aterrador, por lo que comentas, ahora aplicado en una mujer y de consecuencias desastrozas, lo que no me agrado mucho, por la gran admiración que me provocan las de tu sexo, pero como resultado, fue bueno el ambiente para la historia.

Desviandome un poco (que raro) amantes que mueren, no en el instante del placer, pero que mueren, y han dejado huella, son muchas las parejas que podriamos enumerar.

Asi de entrada:
La decisión de Sofia y Profucndo Carmesí

Besos mortales.

marichuy dijo...

Erat

Lo del narcisismo va; de lo demás que planteas, vaya hipótesis más terrible. Creo que en “Matador” pese a lo torcido y disparado de la trama, hay una historia de amor; la perversión de los amantes tiene un límite.

Un abrazo

marichuy dijo...

Magnolia

Querida, ante todo gracias por tu apreciación sobre mi.

Al cines actual de Almodóvar creo que le dicen “maduro”; aunque a mi “Volver” si me gustó hasta un punto, por alguna razón me pareció una historia italiana y casi (probablemente me equivoco) sentí que Penélope quería imitar a la gran Sofía Loren.

Así como la describes, seguro que es preferible morir en el transcurso de la “petite morte” (será que estar enferma me pone un tanto necrofílica)

Un abrazo

Hugo Benitez dijo...

Hola Marichuy, esperando que te alivies pronto.
El cine de Almodóvar es interesante, aunque coincido con Magnolia, últimamente se nota demasiado.
La película que comentas, recuerdo a verla visto y si, es así, muy, muy Almodóvar, pero ¿Sabes? me sorprende mucho tu capacidad de memoria, para recapitularla tan bien, sin lugar a dudas lo tuyo es el cine.

Agregando un poquito al comentario de magnolia sobre la petite morte, yo diría que son la cereza del pastel, mas que pequeñas muertes, es la reiteración de vida en si, es la reiteración, de que vale la pena ser un hombre, para que ella sea una mujer, es ese atardecer sobre un cielo con textura, es, ese todo, ese nada, ese ¿Porque? Y hasta clímax en la fiesta brava.

¿Sabes? El presente es algo raro Por que deja de ser, siendo, el pasado casi nos alcanza en cada momento, así que, si te creo eso de renacer muriendo.

PS no creo en los amores que matan. El amor no mata, mata equivocarse en el amor (hay amores equivocados en todos los terrenos de la vida) Toma miel con limón y agrégale tequila, así, si no te curas, cuando menos te sentirás mejor.

marichuy dijo...

Champy

Como dice mi amigo Paxton, se siente bien feo cuando los creadores que admiramos y/o amamos, hacen cosas que contradicen todo lo que han hecho antes. O sea, ¿viste Góthika?; para mi, junto a semejante esperpento, su anterior trabajo como director, “Los ríos de color púrpura” que no pasa de ser un churrito entretenido, es casi una obra de arte. [por cierto, ya que hablamos los sufrires que me provocan mis amores platónicos, acabo de leer por ahí que mi amadisisísimo François Ozon en su ultimo film... está de un sentimental, para no creerse; sniff, estoy pensando seriamente en mejor ni verlo]

No sé por qué, a sabiendas de que no es su mejor film, pero a mi me encanta “Matador”; extraño porque además, no soy fan de la fiesta brava. De “Hablé con ella”, son muchos quienes, como tu, la consideran su mejor película.

Quizá la confundo pero ¿"La decisión de Sophie” no es un megamelodrama de esos en los que casi se especializó Meryl Streep, donde se daba gusto sufriendo, chillando y sacrificándose hasta lo indecible?; quizá la estoy confundiendo. Ici entre nous (al fin que por aquí no pasa tu cuate Cane, porque seguro parecerá sacrilegio que yo esté atentando contra un “tesoro nacional gringo”), la Meryl solo me gusta en “La amante del teniente francés” y en “Los puentes de Madison”.

Besos convalecientes, que todavía no me muero; pero tampoco estoy como para escenificar “petites mortes”.

marichuy dijo...

Hola Hugo

Así parece, que con la madurez y el reconocimiento internacional, el cine de Pedro Almodóvar ha perdido su carácter subversivo y mucha de su originalidad.

Has de saber que tengo memoria para ciertas cosas, para aquellas que me calan; vieras que hay películas, libros o situaciones de los que no recuerdo casi nada. Uy Hugo! que más quisiera yo, que poder decir que el cine es lo mío. Viéndolo bien, no estoy segura de poder afirmar, así sin titubeos, que algo “es lo mío” (dejando de lado formación profesional y obligaciones laborales), quizá forme parte de aquellos sueños que no he realizado.

Extraño –no voy a cometer la hipocresía de achacárselo a la enfermedad-, pero así como tu lo planteas, es como yo percibo a la llamada petite morte, como una afirmación de que la vida vale la pena, aunque sea solo por ese instante; bueno, por muchos. De la fiesta brava no entiendo nada, pero siempre me ha parecido un espectáculo sumamente erótico e inquietante.

El presente es algo raro? Me hiciste recordar algo que dijo, creo, Victor Hugo sobre que “los tiempos primitivos son líricos; los tiempos antiguos son épicos; y los tiempos modernos son dramáticos”. Entendiendo al presente como los tiempos modernos (aunque ahora se les llame postmodernidad), pienso que si vivimos tiempos dramáticos, por eso que tu mencionas.

Yo me referí a los amores, por decir los amantes, a esos que (se) matan por tanto amarse; pero coincido, lo que mata son los amores equivocados; el desamor, también.

Entre mis innumerables defectos tengo el de ser una pésima bebedora, más de 17° grados de alcohol no aguanto mucho; pero así como “prescripción médica”, suavizado con el limón y la miel, de algo me servirá (espero no sea para emborracharme, porque luego lo dulce de la miel y los 40° del tequilita, pueden resultar traicioneros)

Paxton Hernandez dijo...

Marichuy,

De momento no te puedo comentar como se debe. Prometo hacerlo, y que te mejores pronto.

Beso sin temor al contagio,

marichuy dijo...

Paxton

Gracias, besos sin virus

MagnoliaNegra dijo...

Marichuy:

Sobre la pregunta en mis comentarios.

Es la tarducción de una cación de Pearl Jam , Nothigman.

Dulces noventas.....

Besos para ti.

marichuy dijo...

Magnolia

Gracias, debo haber escuchado alguna vez la canción en su versión original, pero...

Extrañas son las coincidencias, justo cuando sonó el bip de tu comentario, yo estaba de espaldas a la compu leyendo un poema de Whitman, bello pero triste, un fragmento que me parece comparte esencia con esa parte de la canción ["Ella creyó una vez… en cada historia que él tuvo que contar…Un día que ella se congeló… tomó el otro lateral…"], aunque con Wiltman el congelado es él, no ella:

Me miraste y pediste temblorosa
que un te amo, saliera de mis labios,
pero ellos ya no tienen más palabras
pues los golpes de la vida los han cerrado.

Igual estoy desvariando

Un beso

Champy dijo...

Este post esta por demás diverso poético y mortuorio!

Como sigues?

En tu casa ó en la office?

Respecto a lo torcido de las relaciones...... no quiero y nunca he querido ser ejemplo de nada, pero he tenido la fortuna de vivir 2 maravillosas relaciones adultas plenas y satisfactorias, así como 2 así, como tu las describes, torcidas, y es bien importante tener la madurez y los tanates (dirias tu) para cortar por lo sano antes de que el daño sea tal, que en muchas ocasiones las peliculas (como esta) se quedan cortas.

Respecto a la decepción que surge luego de que un ser que admiramos hace babosadas es común...muchas veces imperdonable. pero yo siempre he pensado que hay que balancear y conocer el fondo de la obra.... nada se despega, ni se separa.

Para muchos Buñuel es un genio, él más grande, y en su momento no le perdonaron que realizara Robinson Crusoe..... Luego hizo Susana y no mames...como se atrevió a hecer esas tarugadas despues de haber hecho Los Olvidados...era imperdonable.... a mi en lo personal, Susana me parece hoy, 20 años despues de haberla visto por vez primera tan buena como la primera, y es la pelicula que mas carcajadas me ha sacado en la vida, y mira que eso no es fácil, con las amarguras que cargo. Si nos metemos a fondo en las cabecitas de los personajes, es tan compleja Susana como el Jaibo, solo que en un ambiente diferente y en un tono diferente..... No te quiero convencer que quiza Gothika o como se llame sea buena, quizá si la regó, pero vamos, dice mi jefe Ripsteín que tambien existen los trabajos gastronómicos, al rato el buen Mathieu va a hacer algo que nos haga olvidarnos de Gothika de Amelie de Amén y hasta del Odio.... tu confia en él.

De Pedro.... me da gueva el señor, le reconosco lo mucho que ha hecho, lo bien que han salido bastantes titulos, pero en su caso si me parece muy dificil que se recupere, ya esta grande y su afectación va más por el lado de los egos, las economias y los mercados que por el arte y la edad misma. Pero toda mi vida le agradeceré Hable con ella, Todo sobre mi madre, Mujeres al borde... La ley del deseo y Matador. Mientras siga en su afan de hacer ruido de pasquin y en Lorenizar a la insipida vieja esa que agarró por musa, no conseguirá nada.
No es lo mismo tomar como musa a la Maura o a la Forqué o a la misma Rossy que a esa vendedora de productos.

Y vez como todo fluye?

Tu sige mis consejos.

Aunque hay algo que no alcanzo a .... ver claramente.

marichuy dijo...

Champy,
Más o menos; resulta que por gripa, por fuerte que sea, no te dan incapacidad y si le agregas que mi jefe es obsesivo con el trabajo -ahora resulta que no puede vivir sin mí, ayer me habló para consultarme una babosada, "Chuyita la extrañamos mucho"-, así que no estoy de incapacidad, estoy en casa con cargo a las vacaciones que me deben.

Supongo que en algún momento todos hemos tenido relaciones, a lo mejor no torcidas, pero si equivocadas; y cada quien según su fortaleza (o tanates, diría mi abuela) saldría a tiempo o destiempo de ellas. De nada sirve autoflajelarnos por esas equivocaciones; de cualquier forma han sido experiencias que nos han enseñado algo. Tampoco mentar madres al pasado, e injuriar a los ex con lo que la hemos pasado mal, supongo que hubo un momento en que él (ella) significó algo importante para nosotros... (y ya no me hagas hablar).

De mis decepciones cinematográficas -porque son mías-, tienes razón, supongo que yo no soy quien para juzgarlos, ni a Mathieu ni a Ozon; el primero es más actor que director (solo le conozco “El odio” y “Gothika”) y el segundo, quizá ha trascendido su etapa provocadora (o a lo mejor está enamorado y lo refleja en sus películas).

Ni al caso la comparación, Buñuel es otro nivel, su obra es más equilibrada, no sé que diga la crítica pero yo amo “Viridiana” y “Bella de día”. Así que ni siquiera me atrevo a criticarlo por otros títulos mal reseñados.

De Pedrito, quizá sea “normal” dejar de ser provocador a cierta la edad (por eso no lo entiendo en Ozon, si es casi 20 años más joven que el manchego); a lo mejor a eso se llama llegar a la adultez cinematográfica, y como yo soy una inmadura no lo acepto. Eres muy severo con su nueva musa; aunque eso sí, Sofía Loren solo hay una, UNA; ni silicones, ni poses, ni colágeno en los labios, nada iguala la esencia de la gran italiana.

Todo fluye, ¿en verdad lo crees? Me temo que esta vez te equivocas querido.

Besito sin virus

Hugo Benitez dijo...

Hola Marichuy, como sigues? Mejor o con resaca? Es broma, espero que mucho mejor!
Pasaba por aquí, completando el poema y alguna idea más.


Me miraste a los ojos, penetrando,
en lo más profundo de mi alma
el cristal azul de tus pupilas,
me mostraban, mi imagen reflejada.

Me miraste y pediste temblorosa
Que un te amo, saliera de mis labios,
Pero ellos ya no tienen más palabras
Pues los golpes de la vida los han cerrado.

Me miraste y tu pelo se erizaba
y una gota redonda en tu pupila
que brotó, de un corazón roto
y cayó recorriendo tu mejilla.

Me miraste y tu rostro empapado
me exigía una palabra, una respuesta,
y mentí diciéndote te amo
para ganar de tu cara una sonrisa…
Walt Whitman

Hay quienes también matan así, a mentiras, disparando al corazón por la espalda.
Hay quienes solo dan vida con la petite morte, pero que también matan.
Dos ejemplos de amores equivocados

Luis Ricardo dijo...

Oye, me gustó tu acercamiento al cine. Mmnh te leeré. ¿O no? Mhm. Seeh.

Hugo Benitez dijo...

Otra mas, coincido contigo a nada podemos llamar “nuestro”.
Aunque pensándolo bien creo que todo nos pertenece.

Champy dijo...

Que padre COMADRITA!!!!

A poco no se siente padre que estos idiotas evidencien su pendejez con esas llamaditas???

Y fijate que quizá más importante que la ruputra y los tanates para forzar la ruptura y ...... es el después.

La secuela.

Porque es bien padre y fácil y sencillo hacernos los chingones y pasar por la vida con nuestra coraza de inalcanzables e imbatibles, temiendo volver a las mismas torceduras cada vez más frecuentes y cotidianas.... lo dificil es entrarle al toro por los cuernos (ora si que!) y que la sangre grabada en el psique no se confunda con el capote, y nos permita correr una buena tarde.


De nuestras decepciones cinematográficas tampoco hay que irnos a los extremos mamacita, no te confundas. Yo creo que si eres quien para juzgar, eres una amante de el arte, una seguidora de sus trayectorias y conocedora de lo que hacen. Entonces si alguien tiene derecho a hacerlo eres tu, pero por lo menos esperate a verla, Ozon se merece por lo que te ha dado que le otorgues al menos el beneficio de la duda no? si ya que la veas le quieres mentar la madre pues se la mientas, pero cuando tus ojitos le dicten a tu cabecita que de tu boquita salga la mentada.

Igual para cuando nos llegue a México tu tambien ya estas enamorada y te parece esplendorosa.

Mamacita y Buñuel ahora esta en el Olimpo sagrado, pero cuando hizo esas obras no lo estaba, y asi fue tratado. Por que Ozon no podria llegar allá?

Y de la pinche MUSA mejor ahí la dejamos.

Despues de esta visita reitero lo antes mencionado.

Oye COMADRE, me da gusto que haya nuevos amigos entre tus visitantes!

marichuy dijo...

Hugo

Hola, estoy mejor aunque debo confesarte que no pude seguir tu atrayente “prescripción curativa”…soy un desastre, resulta que no tengo tequila (solo vino tinto y un Vodka que alguien me regaló ¿servirá igual?) y me dio frío salir a comprarlo.

Gracias por tu visita, gracias por el poema, gracias por tu percepción.

Sabes? Yo me asumo con corazón de pollo, debilón; los golpes secos y de frente me duelen, y mucho; no obstante, siempre serán preferibles a las mentiras, a las puñaladas por la espalda. Decirle te amo solo por no querer lastimarlo(a) más, es mucho peor que decir lo contrario. Lo triste es que suele ocurrir a menudo; creo que quizá es por cobardía (o por egolatría) que no queremos fungir como “los malos de la película”, lo cierto es que terminamos siendo peores. Quizá también, se deba a que en la actualidad, al menos yo así lo siento, decir te amo se ha devaluado un poco, uno va por ahí diciendo “te amo” como quien dice “hola, que lindo”. Y pues no, antes de decirlo hay que sentirlo (tu dispensarás, como te habrás dado cuenta, divago mucho). Y ya que divago y que hablamos de equívocos amorosos:

“Te amo así. Más si ahora quisieras por ventura
como un astro eclipsado que huye el negro cendal
pavoneare en lugares que aturde la Locura,
¡está bien! ¡De tu vaina surge, hermoso puñal! “

Ch. Baudelaire, poema XXXIX (fragmentos)
Las flores del mal

marichuy dijo...

Hola Luís Ricardo

Hace tiempo que nos visitamos, con lo buenas que son tus viñetas.

Mi humilde sitio de divagaciones aquí está, para cuando quieras.

Gracias y saludos

marichuy dijo...

Hugo

A lo mejor es una mezcla ¿no? Nada es totalmente nuestro, pero todo nos pertenece aunque sea un poco

Hugo Benitez dijo...

Va pues, si de matar se trata, o mejor aún de morir lentamente.

“¡en el amor busque el sueño del olvido;
el amor para mi es un filo punzante
para dar de beber a esas hembras crueles!

Baudelaire

marichuy dijo...

Champy

Que padre? NO!!! Eso de levantar la bocina y escuchar la voz de la secretaria de mi jefe: “Chuyita le voy a pasar al ingeniero”, o sea, cero gracia, pésima recomendación para mi alivio!!!!

No creo haber presumido coraza de imbatible, ni de inalcanzable; por lo menos no de manera consciente y actuada. Y claro que después de una ruptura (o varias) es mucho más difícil intentarlo de nuevo.

Lo del enamoramiento de F. Ozon, lo dije porque alguna razón debo encontrarle a su repentino sentimentalismo. Cuando algún mercader tenga la brillante idea vender aquí en México “Gouttes d'eau sur pierres brûlantes” (Gotas de agua sobre rocas ardientes”), te la voy a mandar para que veas como era su cine al inicio.

Cuando llegue a México (“Angel” se llama el film en cuestión) ¿yo estaré enamorada y me parecerá esplendorosa? ¡¡¡¡¿¿¿¿????!!!! Sufro nada más de pensar como lo va a destrozar la crítica (aunque la critica me valga como referencia para ver una película, no me gusta que despedacen a mis favoritos).

Te mando un abrazo.

marichuy dijo...

Pues si Hugo, el amor es como un filo punzante; no por ello, menos anhelado.

Y para qué intentar disimularlo, en materia poética me declaro derrotada ante ti: mi memoria al respecto es mala –debo recurrir a mi libro para completar los versos-, en cambio tu, pareces tenerlos muy presentes. Fíjate que el inicio del poema que pones, me gusta mucho

Diríase que mi sangre a veces corre en ondas
lo mismo que una fuente de rítmicos sollozos.
Yo la escucho fluir con un largo murmullo
pero en vano me toco para encontrar la herida

Champy dijo...

Ay Comadre, yo no sufro, a mi me da coraje, pero por suerte mis favoritos son tan hocicones como yo y se defienden solos.

Yo la veo y te cuento.

Ay la llevas Chuchis!

marichuy dijo...

Champy

Creo que Ozon no es de esos, según entiendo es de los que ignoran a la crítica; además de destrozar sus películas, seguro que lo han de tachar de soberbio.

En fin, guardando las distancias y pese a que ya cumplió (hace 2 semanas) 40 años, continúa siendo -por eso no quiero ver "Angel"- uno de mis «Enfants terribles» favoritos; aunque no alcanza la categoría de “maldito” como Baudelaire.

Paxton Hernandez dijo...

Marichuy,

Una de mis mayores fantasías es precisamente esa que ocurre cuando Eros y Tanatos confluyen explosivamente. He de haber visto, para sincerarme, cerca de 10 veces los Bajos instintos: esas "muertes chiquitas" con la Sharon Stone empuñando su picahielo son de otra planeta.

Fíjate, amiga, que el cine de Almodóvar lo encuentro muy problemático. Sobre todo porque no lo considero un cineasta moderno, sino más bien barroco como aquí apuntas. Pero es capaz de aventarse genialides bestiales, lo reconozco.

Un beso, y ya mejora.

Paxton Hernandez dijo...

Por cierto, te pedí un favor en mi blogue. En la entrada de ayer. = )

marichuy dijo...

Paxton

Ahora que mencionas «Bajos instintos», no me acordaba que el personaje de Sharon Stone gustaba e hacer algo similar al personaje de Maria Cardenal en «Matador». El ritmo de bajos instintos más acelerado ¿no?, creo que aquí las «petites mortes» no son muy compartidas, pienso que ella es mucho más dominante [hablando de fantasías; tengo una amiga a quien le fascina esa película, especialmente esa escena que es prácticamente una violación, sobre la mesa del comedor]. El final de «Bajos instintos» es muy intenso, en lugar del cielo teñido de rojo ardiente de «Matador», acá el golpeteo del furioso mar en un anochecer grisáceo (¿así o estoy confundiendo la película?)

Un beso, ya voy mejor; el lunes tengo que regresar a mi sacrosanta oficina -nada más de pensar lo que me espera lo creo que me quiero enfermar otra vez.

PS Ahorita voy a tu blog para ver que tipo de favor, me imagino que tiene que ver con Antrobiotics.

Champy dijo...

Pues que soberbio tan guapo!

Tu perdonale todo comadre!

marichuy dijo...

Champy

Si es muy lindo; yo le perdono todo, hasta que desconozca mi existencia y que tenga novio... pero ¿ponerse sentimental? eso que lo deje para mí.

marichuy dijo...

Una digresión (otra)

Ayer en Guadalajara dentro de la FIL, el escritor brasileño Rubem Fonseca me ha brindado una vindicación, sin proponérselo, ha reivindicado mi absoluta y lamentable ineptitud en materia poética.

“Me gusta la poesía por ser la más bellas de todas las artes, tal vez por eso no la escribo”

... ha dicho el autor de “Grandes emociones y pensamientos imperfectos”.

Es una tontera de mi parte el verlo así, pero el brasileño ha logrado que me sienta un poco menos mal ante mi incapacidad para hilvanar un solo verso, por malo que sea.

Ana Valenzuela dijo...

Hola Marichuy, tantas cosas que han pasado aqui en tu blog, mientras subo y bajo. Bueno, estan en el centro del asunto del amor que duele. Generalmente, suelo ser muy concentrada en el desamor y en el amor.

¿Ya estas mejor?
Besitos

Champy dijo...

COMADRE me cabas de confirmar lo que he sospechado todo este añote que tengo de conocerte.

marichuy dijo...

Ana

Hola, el eterno tema ¿verdad?

Estoy mejor, gracias; un beso y mucha suerte en el Seminario.

marichuy dijo...

Champy, ¿que has confirmado?

¿Que dentro de mi, hay una pequeña sentimental luchando por mantenerse oculta?

¿Que soy una inútil para escribir poesía?

Lamento si te he decepcionado.

Champy dijo...

No COMADRE, no hagas drama..te lo escribo allá.

marichuy dijo...

Champy
Ja,ja,ja. O sea que además de negada para la poesía, tiendo a dramatizar.