escribir

Escribir: tratar de retener algo meticulosamente, de conseguir que algo sobreviva; arrancar unas migajas precisas al vacío que se excava continuamente, dejar en alguna parte un surco, un rastro, una marca o algunos signos.[Georges Perec]

marzo 11, 2010

ausencias violentas

Olivier Raab (acuarela)

El dolor no necesita aprenderse, pero uno puede ser aprehendido por él y quedarse así durante mucho tiempo. El dolor es algo que uno sabe, casi, desde que tiene uso de razón. Los adioses, las partidas de los seres queridos, se recienten, se penan. Todas; pero con mayor énfasis las repentinas, esas que uno no se espera, las que no imagina pueden ocurrir. Y pasa, por accidentes o circunstancias de la vida, de golpe y porrazo alguien se va de nuestro lado y así, de un día para otro, nuestra vida se ve cimbrada por su ausencia y nuestro pequeño mundo se queda un poco vacío, mientras nosotros, súbitamente, nos sentimos presos de una desconocida sensación de orfandad. Imágenes de esa persona, de las experiencias vividas en su compañía, hasta los pequeños detalles que antes podrían habernos parecido insignificantes, de pronto cobran una dimensión desconocida; van y vienen, a veces, acompañados de pequeños estremecimientos, mezcla de dolor y vacío. ¿Cómo plasmar en una imagen la partida de alguien, su adiós definitivo –no necesariamente asociado a la muerte-, su ausencia irremediable? Hace tiempo, una tarde lluviosa, caminaba con un amigo por las inmediaciones del Jardín Botánico, de pronto, en medio de las piedras volcánicas y la exuberante vegetación de ese hermoso sitio, él me preguntó “si pudieras definir con una imagen la partida o la ausencia de alguien -no necesariamente un amante, aunque no está excluido- ¿cuál usarías?” La pregunta, en medio de la placidez de aquella tarde, es decir en el momento menos esperado, me dejó sumida en mis pensamientos, presa de una extraña –en mí- mudez. Pasados algunos minutos, intenté alguna respuesta, torpe y balbuceante; hablé de cielos plomizos; de lienzos en blanco… del color de la nada y luego de la sensación de un repentino agujero en la boca del estómago; el vacío; la sensación de no sentir –valga la contradicción- nada. ¿Cómo dibujar la ausencia, el vacío, la nada? ¿Un cuadro en blanco, en negro, en gris? O quizá, algo más caótico, como una voltereta o como la fragmentación en mil pedazos, de lo que hasta antes de su partida era visto como un todo. No lo sé; sigo sin poderme decantar por una idea concreta, menos por una imagen. 

"Es una debilidad extrema en la que quedamos ante la desaparición de alguien, ésta de buscar hacia atrás las huellas más profundas de lo irreparable. Modificar inevitablemente en nuestras impresiones el sentido de lo que ya fue para ponerlo al servicio de lo que ya no podrá ser. Hay en la violencia de la muerte que nos rodea una desgarradura que se hunde en el pasado para nombrar, con el ruido de su quebranto, la imposibilidad de un futuro. Como si ante la ausencia de ese futuro necesitáramos del estruendo de las palabras ya dichas para llenar con urgencia ese hueco, ese silencio que se abre hacia delante" [Alberto Ruy Sánchez. Con la literatura en el cuerpo, en el ensayo La violenta ausencia de Roland Barthes]
“¿Cómo terminar un amor? - ¿Cómo, entonces, termina? En suma, nadie -salvo los otros- sabe nunca nada de eso; una especie de inocencia oculta el fin de esta cosa concebida, afirmada, vivida según la eternidad. Sea lo que fuere del objeto amado, que desaparezca o pase a la región de la Amistad, de todas maneras, no lo veo desvanecerse: el amor que ha terminado se aleja hacia otro mundo a la manera de un navío espacial que cesa de parpadear: el ser amado resonaba como un clamor y helo aquí de golpe apagado(el otro no desaparece jamás cuándo y cómo se lo espera) Este fenómeno resulta de una limitación del discurso amoroso: no puedo yo mismo (sujeto enamorado) construir hasta el fin de mi historia de amor: no soy su poeta (el recitador) más que para el comienzo; el fin de esta historia, exactamente igual que mi propia muerte, pertenece a los otros: a ellos corresponde escribir la novela, relato exterior, mítico.” [Roland Barthes, Fragmentos de un discurso amoroso]



ººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººº

84 comentarios:

Anónimo dijo...

Si el vacío se pudiera dibujar yo ya haría exposiciones...
Buen texto.

mario skan dijo...

Si tuviera que dibujarse la ausencia, que seguro lo hicieron, no la imagina, a cada uno le viene una imagen de ella, para mi sería un cuadro de un solo tono, cualquiera. La imagen que pones en el post es muy bella, con cierta melancolía muestra a ese bote en la costa sin nadie, está bueno.

saludos

Jo dijo...

Hoy me doy cuenta del porque de las ausencias, de las preguntas mudas de ignorar irremedialemente las presencias con distancias
de hacerse el ciego o .. de hacerse mejor el que ignora...


Entonces comprendí que las lágrimas no podían hacer que alguien que había muerto volviera a vivir. También aprendí otra cosa sobre las lágrimas; con ellas no puedes hacer que alguien que ya no te quiere vuelva a hacerlo, lo peor de ciertas emociones
es el llanto... y viendolo asi no se si el olvido es el peor cuando termina un amor... o
el quebranto o la indiferencia que comenzo a tejerse un dia haciendose nudos incluidos en la garganta que salen a borbotones...
las maldiciones menos dichas, aparecen, un olvido contagioso no debería ser asi de pronto tan cruel

los amores no deberían terminar abruptamente... o si?

Jo dijo...

oye marichuy crewo que volvi porque este comentario ya me causo estragos. Voy a llevarmelo a romperlo a recortarlo a pegarlo

a ver si algo salvo o rescato

:S

La abuela frescotona dijo...

el vacío de las ausencias, suele ser un continuo caer, en un espacio infinito, con el vértigo de la nada rodeándonos...

marichuy dijo...

Jordim

Si, verdad? Bueno, aunque capaz que yo, negada para las artes pictóricas (y de las otras), seguro no lograría ningún lienzo digno.

Saludos y gracias

marichuy dijo...

Mario

Un lienzo monocromático? Pintado con en algún color "triste", supongo.

Sí, esa misma sensación me provocó a mí la acuarela de Olivier Raab: melancolía; quizá porque me remitió a la ausencia, a la partida de alguien; la barca ahí sola, sin nadie que se haga a la mar en ella.

Saludos

chilangoleon dijo...

ayer=vi=la=peli="princesas"=sobre=unas=
sexoservidoras=en=espania=casi=al=final=
una=tal="Calle"=(gachupina)=le=dice=a=
la=morocha=dominicana="Zulema"=
"existimos=porque=alguien=piensa=en=
nosotros=y=no=al=reves"=asi=que=
mientras=los=que=nos=abandonan=se=van=
desaparecen=huyen=se=retiran=renuncian=
se=esfuman=se=largan=desalojan=vacian=
etc=nos=piensen=seguiremos=existiendo=
y=ademas=que=tan=lejos=se=pueden=ir=
realmente?=realmente=pueden=
"desaparecer"?=del=Universo=no=salen=
por=cierto=y=en=ese=universo=estamos=
nosotros=asi=que=al=final=coexistimos=
en=el=mismo=lugar=chale=de=cual=fume??

marichuy dijo...

Jolie

Así es, las lágrimas sirven, quizá, para aliviar o por lo menos exudar un poco, el dolor. Pero nada más. Cuando alguien deja esta vida o nos abandona, ni llorando ríos de lágrimas lograremos hacerlo volver.

Los amores no deberían terminar de manera intempestiva, pero a veces así pasa (y no porque el amor acabe, sino por otras razones).

marichuy dijo...

Jolie

T'a bueno llévese su comentario (jeje); en ocasiones a partir de un comentario, casi podemos escribir un post.

chilangoleon dijo...

por=eso=como=dicen=las=canciones=de=
borrachos=despechados="es=peor=ser=
ignorado=que=abandonado"=pero=yo=les=digo=
"ignooorame=ca"=jeje

marichuy dijo...

Querida Abuela

El vértigo del vacío... auch, qué imagen más impresionante.

Un abrazo

chilangoleon dijo...

te=falto=decir="besos=vertiginosos"=jeje

marichuy dijo...

Chilly

Aunque estemos en el mismo Universo, cuando alguien parte de nuestro lado para siempre, sea porque muere o porque simplemente se va, su ausencia se convierte en algo irremediable.

Creo que lo peor, es el olvido del otro, ¿o no?

marichuy dijo...

Chilly

Jajá, canciones de borrachos? No creas, a veces ni falta hace echarse unos tragos, para sacar el despecho. En mi post del viernes pasado ("viernes ligero y palmarés 2009"), hasta el final viene un bonus musical: Marion Cotillard cantando "Take it all"... puro despecho... y le sale bien, sin nada de alcohol.

Lata dijo...

Y el francés? y?... bueno, me gusta la ondita.

El dolor... a qué tema, mujer... qué tema.
SI yo supiera cómo carajos manejarlo...

/ dijo...

El dolor por la ausencia de un ser querido me resulta insoportable. Por un amor que se terminó, lo puedo llegar a pilotear.

BESOTES MARICHUY, BUEN FINDE Y HASTA EL LUNES!!!!!!

marichuy dijo...

Latita

¿Cuál francés, tú? ¿Thierry Neuvic? Por ahí anda.

Qué tema; extraño a mí me apreces que lidias bien con él.

Besito

marichuy dijo...

Stanley

Dos dolores diferentes, sin duda; tanto como la forma de enfrentarlos.

Un beso

marichuy dijo...

Dice Roland Barthes:

"La necesidad de este libro se sustenta en la consideración siguiente: el discurso amoroso de hoy es de una extrema soledad. Es un discurso tal vez hablado por miles de personas (quién lo sabe?), pero al que nadie sostiene; está completamente abandonado por los lenguajes circundantes: o ignorado, despreciado, o escarnecido por ellos, separado no solamente del poder sino también de sus mecanismos (ciencias, conocimientos, artes). Cuando un discurso es de tal modo arrastrado por su propia fuerza en la deriva de lo inactual, deportado fuera de toda gregariedad, no le queda más que ser el lugar, por exiguo que sea, de la afirmación..."

[Roland Barthes, "Fragmentos de un discurso amoroso". Siglo XXI Editores. México 2009]

Champy dijo...

Ay COMADRITA en ocasiones ni yo me entiendo, pero tengo algo así como una certeza que no estoy seguro mezcla con que, que me dice que todo es de adentro, el dolor, el gozar, el ignorar y el padecer, el tiempo invertido y el perdido tambien.
A mi no me la pega el que dice que me olvido y que no piensa en mi, porque hasta ese tiempo que se esfuerza en no pensar tiene un motivo.
Aqui tambien entra el doble rasero, la maldita negación que todo lo nubla....de veras de veras deveritas...tan dificil es reconocer algo???
Si, somos débiles y frágiles y temebleques...el tiempo que tardamos en asumir el error.... Y mas piro todavía, aferrarnos a culpar al otro de tamaño daño...No, asumamos que la regamos, asumamos que nos equivocamos, asumamos que nos falto algo, malicia fuerza pasión coraje madurez cordura sensatez ternura algo, en algo somos responsables, y empecemos el proceso siguiente.
No me gustó nadita nadita nadita tu Nine, ni siquiera la parte de la borrachita.

2046

marichuy dijo...

Champy

La negación, creo es lo peor.

Tú preguntas:

"Aqui tambien entra el doble rasero, la maldita negación que todo lo nubla.... de veras de veras deveritas... tan dificil es reconocer algo???"

Pues claro que es difícil reconocer algo y más un error.

A veces creo que tú naciste con algún tipo de chip indexado, por eso puedes desentenderte de todo; separa tan fácilmente sus sentimientos de lo demás.

Sobre NINE, por enésima vez te repito (se ve que no lees mis respuestas) que a mí me pareció un churro, pero de que la canción de Marion Cotillard me gustó, pues sí. Lo que me extraña es que reniegues así de este churrito después de haberte soplado la, esa sí, insufrible, ridícula, cursi y empalagosa hasta el coma diabético "Mamma Mía", nefasta como pocas.

Besitos

Champy dijo...

Ay pero yo fui de cabrón y de morboso, nomás para ver a la vieja vendida hacer el rídiculo!!! pAra ver las islas griegas en gandotas y en hermosas!!! Y tambien, no tengo porque "Negarlo", porque el original allá, fue una muy grata experiencia.... no se repitió, pero tampoco lo nubla.
es que lo que hacen simplemente me parece patético!!! Pobrecito Fellini! Ojalá que allá donde este, no la vea.... ay pinches gringos jijos de la chi...que nomás no toquen La Dolce Vita ni La Strada porque enontonces si, temblará de tal magnitud que California entera será tragada por el Pacífico. He dicho!
Bueno tu bodachita se ve mona, sus ojos son bellos fotografielos quien los fotografíe.

2046

Anónimo dijo...

Marychuy, muy hermoso texto…aún hoy no se que es peor si un largo, largo adiós o un repentino no estar nunca más.

A mi lo que son las pérdidas de seres queridos o de amigos, en verdad ni color me dejan, me dejan una terrible sensación de cruda…que puede durar tanto cómo el dolor mismo.

Las pérdidas repentinas suelen ser terribles, a mi me sale el enojo conmigo ¿Por qué no le dije…? ¿Por qué no lo abrace más? Y muchos más ¿Por qué?

Gracias por esta entrada, gracias por compartir tus lienzos el día de hoy.


Un abrazo

Menospausas

chilangoleon dijo...

cual=vieja=vendida?

Champy dijo...

La Streep....

Como se puede ser tan frío y vender calor a un pueblo de témpanos?

2046

saqysay dijo...

Marichuy:

Saludos, bajo un fuerte temblor. No hay comunicación vía celular.
Y con alerta de Tsunami en la zonas costeras.

No te puedes imaginar, que susto que tengo.Cariños, Cuidate mucho!

Champy dijo...

Creamos o no creamos.... rezar no daña.
Que tiemble pero en California.
Viva Chile! Viva Allende!
2046

El eremita dijo...

Q hermoso Post, ya me fue inevitable intervenir. Llevo siguiendo tu blog semanas atrás, embelesado con tus notas, disfrutando tu discurso, fluyendo entre tus palabras.
Este ha sido particularmente hermoso. El tema de la ausencia me convoca, me transita desde la adolescencia, esa zona insondable donde nos volvemos a reencontrar con el adiós a la infancia y una nueva forma de ver nos compete: la visión hacia nuestra autonomía. ¡Pero que oscuro abandono hay en la independencia cuando recién la tomamos en conciencia!
Si hubiera de dibujarla lo haría en un lienzo violeta que al mirar profundamente me transportara a un lugar calmo, la nada de silencio atemporal.
Vacío

Workaholica dijo...

Mmmmmmmmmmm

No pude....

Imposible describir en una imagen el dolor... :(

Besos

Mafalda dijo...

...


Lo que me llevo de este post no son recetas para acallar las ausencias, o el descubrimiento de la negación de las mismas, o el camino para llegar al olvido, o saber de qué están hechos los recuerdos, o si al llorarle al ausente o al pensarle esto le condiciona SER o nos condiciona SER a nosotros por el simple hecho de ser recordados o pensados, o si las lágrimas limpian el alma o... etc,.

Nop, me llevo la idea interesante y al mismo tiempo inquietante de darle forma al dolor.

¿Tendra forma y por consiguiente sombra el dolor?, ¿tendrá color y movimiento?, en caso de ser estático ¿será abstracto?

¡Vaya cosa!

Me recordo la última novela de Ana clavel: "El dibujante de sombras"

De este libro dice Ana Clavel:
"Hay un suerte de magia, de alquimia que está presente, de simbolismos, como esas otredades en las que tarde o temprano nos acercamos a abrevar"

Y creo mi Marichuy, que las preguntas más entramadas nos hacen crecer más que cualquier duda de cliché.

Un saludete mi Flaquis.

Mafalda

marichuy dijo...

Champy,

Jajá te pasas, o sea: tú si tienes excusa? Pues mira, creo que para ver las Islas Griegas... hay hartos DVD turísticos...

NINE es el arrabal, sólo que medio glamoroso; mala película y muy kitsch, pero no melcochosa ni llena de merengues como “Mamma mía”. En cuanto a Marion, ella es buena, buena actriz realmente y me atrevería a decir que en medio del desastre, ella sale más o menos bien librada. Es la única (de todo el mujererío) que realmente actúa y no sólo se dedica a desfilar como si anduviera en un show de Victoria's Secret –como atinadamente dijo un crítico de cine dominicano- o fuera autista (Niccole está desconocida) y además, me parece que Mme. Cotillard canta bastante bien. Punto… ah, y Daniel Day Lewis es un actor enorme, aunque aquí lo luzca en todo su esplendor. Pero esto no le quita lo churro al filme.

Yo, como le decía a Ernesto Diezmartinez en su blog, por quien realmente sentí pena fue por mi admirada Sofía Loren.

Besos kitsch

marichuy dijo...

Querida Menospausas

Me da gusto tenerte aquí; ya que te haya gustado la entrada, es un plus.

El color como cada quien vemos el dolor, cualquier dolor, en este caso el provocado por una ausencia cambia, creo, no sólo de persona apersona, sino incluso en una misma persona de tiempo en tiempo.

Un abrazo

marichuy dijo...

Chilly

Ya te contestó Champignon: M. Streep

marichuy dijo...

Querida Saqysay

Te agradezco mucho el saludo; tú con tus nervios, con la tierra inquieta y todavía tomándote el tiempo para pasar acá.

Un abrazo fuerte

marichuy dijo...

Champy

La chica que comentó antes que tú (Saqysay), vive en Chile justamente

Pero no seas así, pobres californianos y luego, con tanto paisano que tenemos por allá; además, si no me equivoco, la falla de Sn. Andrés nos toca a nosotros y a los gringos... capaz que un terremoto allá, nos afecta a nosotros de alguna manera

Besitos

marichuy dijo...

El eremita

Hermoso, tu comentario. Gracias.

"(...) esa zona insondable donde nos volvemos a reencontrar con el adiós a la infancia y una nueva forma de ver nos compete: la visión hacia nuestra autonomía..."

Qué bien defines esta etapa de tránsito; lo que duele, creo, no sólo es la incertidumbre, el no saber lo que vendrá, sino también, a mi modo de ver, ese adiós definitivo a la Patria de la Infancia. Duele la infancia perdida, cuya ausencia se reciente, de manera especial, en los momentos en que nos sentimos extraviados, solos y conocemos de esa sensación de desamparo, orfandad, una que ni toda la adultez, autonomía y (supuesta) experiencia, nos ayuda a solventar.

Saludos y gracias

marichuy dijo...

Work's

Será porque para ti, el dolor es algo informe e incoloro... de tan duro de soportar que es.

Besitos

marichuy dijo...

"¿Tendrá forma y por consiguiente sombra el dolor?, ¿tendrá color y movimiento?, en caso de ser estático ¿será abstracto?"

Mafis

Te contesto con tu propia expresión:

Vaya cosa, es una pregunta demasiado inquietante, que lo deja a uno girando un rato; no sé, quizá no sería malo que tuviera color. Después de todo, por ejemplo para el bienestar, la paz interior, se asocia al azul. Donde le veo más inquietud, es en pensar en su sombra; como imaginar un dolor en dos dimensiones…

No conozco esa novela de La Clavel, pero con esa cita que dejas me acabas de despertar mucho interés.

Un abrazo

virgi dijo...

Los desgarros por la ausencia (de la clase que sean) no son fáciles de concretar. Me remito, entonces, a Marguerite Duras y su alucinante El Dolor, donde toca hasta el fondo los matices de esa situación. A mí ese libro, de verdad, me asombró.
La posibilidad de la muerte, de la ausencia definitiva, de la herida que se produce, del dolor (como sencillamente lo titula), de los recuerdos...

¡Ay, esa cabecita siempre craneando!
Un abrazo, tesoro

Unknown dijo...

cada espacio vacio es una oportunidad....

JP dijo...

-- marrichuy, la unica ausencia existente es la que nunca fue. Los muertos viven mas en nuestros recuerdos que algunos vivos, quienes cuales fantasmas nunca sembraran nada en nosotros si no los dejamos conocernos. Quiero decir, la ausencia de alguien solo es posible si nunca se acompleto ese reconocimiento, ese estar realmente con alguien; conocerse es mirarse como semejante, y eso toma tiempo, amor y paciencia. Besos!!!

Champy dijo...

Pero Chile ya noooo!!!!
Entonces Filadelfia o Maryland o NY o algo fuera de la falla pero Chile ya no.

2046

Unknown dijo...

Ante la ausencia es que uno comienza a añorar lo qu e antes resultaba insignificante... esos momentos, esos breves instantes que uno quisiera volver a repetir por más breves que hayan sido... Es ese hueco que jamás se podrá llenar con ninguna otra cosa... Me gusto mucho lo que escribiste, me hizo recordar mis propias pérdidas, las que ya he llorado, las que aún lloro y, obviamente, las que lloraré... Un abrazo enorme...

marichuy dijo...

Querida Virgi

Si alguien supo de vacíos, ausencias y dolor, esa fue Marguerite Duras. No he leído "Dolor", pero sí algunas notas al respecto, cosas que ella escribió respecto del dolor, de la sensación de la nada, de hallarse en el el fondo de un agujero y sentir que nada la salvaría. Recuerdo la primera vez que vi "El Amante", al final ya en el barco de regreso a Francia, de pronto suenan las notas del Chopin "más triste de su vida" y es entonces cuando por fin puede llorar por todo lo que no había podido llorar en su joven vida... Uff, yo lloraba con ella, como vil plañidera.

Admiro tanto a esa Mujer.

Un abrazo

marichuy dijo...

Toño

No creas, no siempre es así; hay vacíos y ausencias, que no se pueden llenar como quien ocupa un espacio vacío con otro mueble.

marichuy dijo...

Jota-pechocho

La ausencia violenta (la que llega así de manera intempestiva), provoca un dolor igual de inesperado y al mismo tiempo, al menos en algunos casos, deja un vacío que no puede llenarse tan fácilmente.

Eso sin menoscabo de los sentimientos, complicidades y lazos creados que tú mencionas.

Besitos

marichuy dijo...

Champy

Ni en Chile, ni en México, ni en ningún sitio; mejor que tiemble en Marte, je.

Besitos

marichuy dijo...

Nano

Y al final, qué triste no? No me refiero a llorar las ausencias o no poder llenar los vacíos que estas nos dejan; sino a que se cumpla el adagio y uno sólo aquilate las cosas cuando ya no las tiene.

¿Qué forma tendrá el dolor? ¿Qué color el vacío, la ausencia?

Gracias por tu comentario

Un abrazo

Ju dijo...

Marichú,

Por allí arriba alguien habló de los "desgarros por la ausencia" y creo que esa es la palabra...

Hace un par de años atrás, hubo una exposición fotográfica llamada algo así como "La presencia de la ausencia". La muestra era sobre las/los desaparecidos durante los años de dictadura militar en nuestro país. La idea era exponer fotografías "antiguas" en las que estaban las personas desaparecidas, y luego años después la misma toma, sin esa persona.
Mire: http://www.elortiba.org/notapas358.html

Y bueno, pienso en eso...en la presencia que tienen ciertas ausencias, y como incluso, algunas cuando una cree que ha aprendido a sobrellevarlas, vuelven a doler.

Abrazo.

Jul

marichuy dijo...

Jules

La Presencia de la Ausencia, nada más cierto, hay ausencias que nunca dejan de estar presentes. Y esa presencia del ausente, en algunos casos, nunca deja de doler.

Esa muestra fotográfica debió ser muy interesante; me encantó esto "fotografiando ausencias", a mí, que busco una imagen o un color para el dolor de la ausencia (o por cualqueir motivo) y también, la imagen, el colore de la ausencia.

Un abrazo

Champy dijo...

Ay que zacataona me saliste! Que les tiemble a los pinches gringos! y que les lleguen 2046 tsnuamis y que los marcianos invadan NY y sus costas sean devoradas por huracanes!
Si el humano "normal" no puede ni podrá hacer nada contra el maldito imperio, ps que la madre de todas las madres les parta la suya.
Pobrecitos marcianos mira mira y a ellos porque les va a temblar?

2046

marichuy dijo...

Champy

Ja, eso no es ser zacatona; sólo que no creo que con temblores en su tierra dejen de ser lo que son.

Besitos

Marina Agra dijo...

Y yo llego acá y leo este post y no puedo más que llorar y decirte, marichuy, que despedir un amor, cosa que me sucede en este preciso instante, es exactamente el vacío, es exactamente una vuelta a la niñez del más tierno bebe, como si uno no pudiera valerse por sí mismo... Es demasiado triste.

Champy dijo...

Ahhhh!!! En eso si estoy de acuerdo contigo, siempre serán los mismos imbéciles, perooooooo. Ya serán más poquitos. JEJEJE

2046

malbicho dijo...

yo alguna vez vi una fotografía en blanco y negro de un puerto europeo, de alguno de esos países de Europa del Este, no era invierno porque no estaba helado, pero sí con nubarrones espesos y una niebla densa, al frente de todo una banca vieja de madera, una banca vacía

esa es mi imagen para la ausencia

Anónimo dijo...

upss!
que dificil comentar cuando se ha vivido ausente durante mucho tiempo a causa de la ausencia de alguien...
abrazos y que tengas un excelente fin de semana
=)

marichuy dijo...

Marina

Me apena mucho no ser capaz de decirte nada coherente, lo que se dice nada. Nada de lo que diga, servirá, ni remotamente para resarcirte mínimamente de esa sensación de orfandad y vacío. Es horrible y es el más común de todos los lugares comunes, pero no por ello menos cierto: sólo el tiempo, caprichoso como el azar, logrará acarrearte un poco de alivio... algún día.

De momento, te mando un fuerte abrazo,

marichuy dijo...

Champy

Si a todo lo que ya son, les aunamos la "victimización", entonces sí que serían absolutamente insufribles y detestables. Mejor los dejamos así.

Besitos

marichuy dijo...

Malbi

Muy cierto. Hace tiempo (cunado estabas sin Internet) tuve aquí la foto de una barcaza, algo destartalada, abandonada en algún ignoto sitio de la costa bretona. A la orilla un mar gris y agreste, un lugar solitario bajo el cielo plomizo... toda esa imagen, melancolía pura, hablaba de vacío, de abandono.

marichuy dijo...

Ana

Las ausencias, el dolor que estas nos provocan, nos hacen sentirnos como extraviados, lejanos a todo... hasta de nosotros mismos.

Un abrazo

Georgells dijo...

El dolor, como la alegría, como los colores, como los aromas, son inasibles de manera precisa en el mundo de las letras, de las ideas abstractas y de las sutiles metáforas.

Por ello mismo, imágenes pueden ser muchas. Una pesadez invencible, quizá. Un sol que no calienta, un cielo azul pristíno que no nos da luz... Una noche de indefensión, en la que protegemos con fuerza una almohada entre los brazos, para convencernos de seguir enteros...

Y a la vez, ninguna imagen es justa, perfecta, ni aceptable para todos, por que la tristeza es íntima, como el dolor y cada quien sabe cómo la vive...

Y de las relaciones... alguna vez escuché que son como los vuelos en avión: lo único realmente interesante (y peligroso) es el despegue y luego el aterrizaje. El inicio y el término es donde se gesta la tragedia. El resto del vuelo... no tiene gracia.

Abrazo!

G.

LUIS TORRES dijo...

Hay preguntas sin respuestas querida amiga, la perdida de alguien muy querido en definitiva puede ser jodido, pero el recuerdo de esta puede aplacar ese vacio.

Xabo Martínez dijo...

El que invento el espejo, lo hizo para que al mirarse (sin animo naricisiano) lograra mirar el tamaño del vacio, del dolor que queda ante la ausencia de un rostro que parece estar fijo y sin grietas aparentes. Quizas no es casualidad que una de las cosas que primero se rompe en un drama sea un espejo que se astilla en la planicie del suelo. Y que se hace añicos. No concebimos el dolor que nos da la imagen (bella, completa) sea la misma que se hace polvo por dentro. No lo vemos pero lo sentimos que es una crueldad seguir viendo asi (viviendo asi) el mundo en su apariencia sin resquicio para ese dolor que nos inunda y que se apodera de nuestro ser. Pero si el sentimiento pudiera pintar una imagen me inclinaria por algo parecido a la melancolia de Durero.

Un abrazo sabatino

marichuy dijo...

Georgells

Cierto es que cada dolor, cada ausencia, nos duele -valga la redundancia- de manera distinta y única a cada uno de nosotros. Y así también, en una misma persona el dolor puede revestir distintas caras, colores, aromas...

Sobre lo que comentas acerca de las relaciones, me acordé de algo que dice J. Saramago en "Viaje a Portugal" (no es exacto, cito de memoria):

Como todo buen viajero sabe, el verdadero encanto no reside en el destino, sino en la forma que que cada uno realiza el viaje. Siendo exactamente el mismo, un trayecto nunca es igual no solo entre distintas personas, sino para una persona, el camino ya conocido, al volverse a recorrer, nunca resulta igual.

Un abrazo

marichuy dijo...

Luis

Creo más en que, en cierta medida, los recuerdos pueden aplacar el dolor y hasta medio llenar el vacío, a que un vacío es una nueva oportunidad...

Saludos

marichuy dijo...

GAB

Ay... me dejas mucho en qué pensar: mirarse a un espejo y sólo alcanzar a mirar el vacío, debe ser la cosa más dolorosa que hay. ¿De qué tamaño pude ser el vacío, la imagen que de este te devuelve el espejo?

La melancolía de Durero, es una imagen emblemática sobre la ausencia, la soledad, el vacío...

Un abrazo

Lily dijo...

Parfait

Un miracle de sable fin
Transperce les feuilles les fleurs
Eclôt dans les fruits
Et comble les ombres

Tout est enfin divisé
Tout se déforme et se perd
Tout se brise et disparaît
La mort sans conséquences

Enfin
La lumière n'a plus de nature
Ventilateur gourmand étoile de chaleur
Elle abandonne les couleurs
Elle abandonne son visage

Aveugle silencieuse
Elle est partout semblable et vide.

- Paul Eluard-

Anónimo dijo...

cuantas cosas mezcladas en un solo momento, cuando hablas de dolor, de ausencias, soledad...tu dices que no sabrias como ilustrarlas, yo no sabria ni como definirlas. Yo me voy por los tonos azules, las cosas sin movimiento es lo que me lleva a sentir lo que defines. Nose... en tu divan hoy me dejaste bien pensativa nena.


te dejo un abrazote!

marichuy dijo...

Lily

Me encanta Paul Èluard, hay en la mayoría de sus poemas -por no decir todos- una aliento melancólico que me atrapa.

Un beso

“Creí que me rompería lo inmenso, lo profundo
Con mi pena desnuda sin contacto sin eco
Me tendí en mi prisión de puertas vírgenes
Como un muerto sensato que había sabido morir
Un muerto coronado sólo de su nada
Me tendí sobre las olas absurdas del verano
Absorbido por amor a la ceniza
La soledad me pareció más viva que la sangre”

-Paul Èluard-
La Muerte, El Amor, La Vida (fragmento)

marichuy dijo...

Sonis

Fíjate que a mí los tonos azules me remiten a la languidez, la calma, nunca al desasosiego, al dolor ni al vacío. Pero cada cabeza es un mundo, bien dicen.

Un abrazo

Tessitore di Sogno dijo...

Querida Marichuy,

Nunca, ningun libro, ni siquiera Paula de Isabel Allende me ha pegado tanto acerca de lo IRREPARABLE como EL AÑO DEL PENSAMIENTO MÁGICO (descarga aquí el primer capítulo). En este maravilloso libro-memorias, Joan Didion intenta elucubrar sobre como interpretar y afrontar la ausencia de su esposo quien muriera repentinamente de un ataque al corazón mientras cenaban juntos en su apartamento de NY. "La vida cambia rápido. La vida cambia en un instante. Te sientas a cenar, y la vida que conoces se acaba. El tema de la autocompasión." así da inicio a este desgarrador relato en donde aparte de analizar su duelo y mientras lo escribe, su hija Quintana Roo sufre una terrible enfermedad que, meses después de la muerte de su padre también fallece. Me parece conmovedor como Didion y Allende relatan su dolor en el mismo momento en que lo viven, pero al mismo tiempo usan el recurso de la escritura como catarsis a su proceso de duelo, de lo IRREPARABLE. Y es que, como bien mencionas, ¿cómo describes lo irreparable?, ¿cómo encontrarle un eufemismo?, nada, no lo hay ni lo habrá. Quizás solo los que lo hemos vivido sabemos bien lo que es y lo que en si la misma palabra define: IRREPARABLE.

Leí tu maravilloso texto del Océano, me recordó tanto a LAS BRUJAS DE ESMIRNA (descárgalo aquí) sucede que es todo un boom ahora en Grecia porque en esta mágica novela (que ya los críticos comparan con La casa de los espíritus y como agua para chocolate) la escritora narra la vida de una mujer griega en la época actual que recibe en el día exacto de su veintitantos cumpleaños un baúl que le heredó su abuela y que, dejó instrucciones explícitas para que lo recibiera ese día exacto. A sabiendas de que su tía Catina fue una mujer muy rica esperaba un tesoro pero al abrirlo solo encuentra anotaciones y un libro de conjuros con los que lograra dominar a los hombres a su antojo y así dejar la pobreza para convertirse en la mujer mas rica de Esmirna. De paso, es una dura crítica a la cultura Otomana. Un tesoro ese libro y un tesoro tu texto. Agradezco enormemente que lo compartieras, que fascinación hay en las historias que pasan de generación en generación.

Por ultimo y sobre los barcos que llegan a tierra te cuento que desde que vi la peli "Good will hunting" en la escena en que Matt Damon le descifra el perfil psicológico del cuadro que Robin Williams tiene en su estudio, de un barco en mitad de una tormenta y éste le dice representa el dolor por la pérdida de su esposa, pues desde esa vez me ha entrado una fascinación por la pintura de barcas y su significado. A su vez, los que llegan a tierra cuando ha terminado la tormenta (sea en las condiciones que sea) para mi sin ser psicólogo ni nada me dan la impresión de que se ha logrado superar obstáculos, para encontrar paz. Perdona por colgarte aquí tanto rollo, pero tenía varios pendientes, pequeñas tonterías mías que quería compartir contigo.

Te dejo un abrazo caluroso!!!! Llegué de mi paseo en bici y de correr en la pista del sope y ahora me espera un rico baño de agua helada con la que espero paliar un pelin este calor cortesía de nuestro sistema económico desmedido y vorazmente desigual.

marichuy dijo...

Querido Tessitore

Pienso lo mismo: el duelo de lo irreparable, dura, con sus más y sus menos, para siempre. Uno nunca acaba de llorar y extrañar. Así de simple.

Creo que mucha de mi fascinación por el mar, indómito, ignoto e inasible, se debe justamente a que a él asocio el color de la ausencia, la sensación de perdida infinita e indescriptible y al mismo tiempo, de misterio y posibilidad inabarcable.

Gracias por las recomendaciones de lecturas; la griega se me antojó mucho. Ojalá pueda conseguirla completa.

Un abrazo, ya con el clima algo refrescado

Marina Agra dijo...

Muchas gracias, marichuy!

Fernando García Pañeda dijo...

Creo que la imagen de la ausencia es un objeto asociado a la persona ausente. A veces en el cine nos muestran la habitación de una persona ausente como doloroso recuerdo (sobre todo si se trata de un niño, una niña); pero la imagen de la ausencia no es la habitación sin esa persona, sino todos y cada uno de esos objetos en sí.
Cuando nuestro pirata pequeño, con poco más de un mes, tuvo que estar una semana larga en el hospital a causa de una bronquiolitis, ver su moisés vacío era un mazazo insorportable; pero lo era el objeto, la propia cuna, no el vacío que la anulaba.
Un abrazo.

marichuy dijo...

Marina

Pero qué agradecés? Nada... por favor.

Un beso

marichuy dijo...

Fernando

Te leo y de inmediato visualicé esa imagen: el moisés del pirata pequeño, vacío y al mismo tiempo lleno de recuerdos de él. Sin duda muy doloroso.

Demasiadas imágenes pueden asociarse al vacío, a la ausencia y, por ende, encarnar el dolor que estos nos provocan.

Un abrazo

jess dijo...

Siempre he creído que el amor, al igual que la energía, no se crea ni se destruye, sólo se transforma.

:)

Y a quien mucho ama, mucho le será perdonado. :)


La grandeza de las ausencias (¿definitivas?) es que tuvieron un preámbulo, y en dicho momento, nuestro espíritu trascendió.

Decía mi película animada favorita: "No existen los finales felices, porque nada termina."
:)

Ajajá!! ya escuché "Viva la Vida" :D

Ja, esa rola me pone feliz, feliz, feliz como lombriz.

Un abrazote mi estimada y perdón por el retraso en esta entrada!!

marichuy dijo...

Jess

Seguro: en la mediada en que esa persona nos importó (y marcó), justo en la misma (y quizá hasta más) es que penamos su ausencia.

Escuchar "Viva la vida" y no sentir ganas de bailar... iba a decir que es imposible, pero no: si uno arrastra una gran desazón, no hay rola que le haga bailar, ni reír , ni sentirse dichoso.

Un abrazo

QUANTUM dijo...

Sobre la respuesta a la pregunta que se hace en este post, te digo que me he quedado pensando e imaginando desde que la leí.

Sobre el fragmento de Roland Barthes, me hace preguntarme el origen de los poetas.

marichuy dijo...

Quantum

Quizá no haya una respuesta.

Sobre Barthes (la historia de ese libro es muy, muy interesante) y los poetas; seguro que éstos, en algunos casos, sí son como de otro mundo, jeje.

QUANTUM dijo...

Así como lo expresas y el fragmento que has puesto me despierta ganas de leer el libro y escuchar su historia. Lo haré.

Sabes?! Yo no sé tomar Vino.

Tus libros favoritos, tu música, tu mundo; lo que lees, lo que escuchas, lo que degustas; lo que vives y sientes. Lo que hay en ti es tan exquisito que me veo a mí todavía tan vulgar.

marichuy dijo...

Quantum

Te decía que la historia del libro de Barthes es muy interesante, por algo que en realidad es simple y hasta lógico:

No pocas veces, los filósofos suelen abordar temas fundamentales desde una óptica algo distante; por ejemplo, hablan del alma o del dolor como si estos fueran entes ajenos a su mundo. Roland Barthes, literato y semiólogo, escribió este “Fragmentos de un discurso amoroso” bajo circunstancias que contravienen ese distanciamiento. Resulta que él impartía –en París- un curso sobre Literatura Romántica Alemana con todo el aplomo de un literato versado en la materia, pero desde una óptica casi neutral. Sin embargo, apenas iniciado el curso, fue presa de un súbito enamoramiento que le cimbró la vida. Y fue a causa de ese hecho que se olvidó del enfoque aséptico y distante de su curso, para adentrarse en él conforme el dictado de sus pulsaciones amorosas y cardiacas. El resultado de esos vaivenes emocionales, es este libro que no sigue un curso lineal, sino que avanza dando tumbos al ritmo de los saltos emocionales del autor. Un libro sobre el amor, escrito al ritmo de altibajos amorosos y pasionales.

En lo que a mí respecta; nada más lejano que esa imagen tan elevada como idílica que delineas. Sólo soy una mujer, un ser humano, normal; a lo mucho, podría decir en mi favor que soy harto sensible. No más.

Saludos

QUANTUM dijo...

Te agradezco que me hayas platicado acerca de el libro, he escuchado atentamente cada línea. Sin duda disfrutaré leerlo.

Y corroboro: ERES UN SER HUMANO HERMOSO.

En unas horas más será hora de ir con Morfeo.

Marichuy, disfruta del sueño!!